Mi despertar poético fue en Astorga donde estaba haciendo los estudios superiores de Teología a mis 20 años. Allí reinaba un ambiente poético y empecé a hacer una pequeña antología de poemas de otros compañeros míos y sobre todo de poetas que íbamos conociendo: Antonio Machado, Juan Ramón, Leopoldo Panero, García Lorca, Gerardo Diego, que pasó unos días del verano con nosotros y nos recitó varios poemas.
Me di a conocer por la publicación de una antología lírica: Letras de Luz. Misterios encendidos (Madrid, Editorial PS, 1994) idea genial de Astor Brime, otro poeta también redentorista en la que me incluye con 10 páginas de poemas de mis primeros años de estudiante y, después, de profesor y formador de teólogos. Allí aparece mi “Canción a los 20 años”:
No digáis que la vida resbala como un río
sobre la roca dura de las desilusiones.
Que no vale la pena vivir ni haber nacido
en este mundo áspero de ritmos trepidantes.
[…] yo extiendo mi canción como túnica al viento
y pongo en pie mi canto de veinte primaveras,
veinte aspas de molino fabricando esperanzas.
También en esta antología se publica mi poema dedicado al Cristo de Carrizo, premiado después en Villafranca del Bierzo, del que escribió el poeta jesuita P. Cué esto: “Releo sus versos y vuelven a traspasarme. Quedo deslumbrado por dentro y por fuera. Y herido, pasmado. De verdad, no son fórmulas ni frases. ¡Qué difícil es escribir versos a un Cristo en la cruz! Cuando parece que todo está dicho. Mi enhorabuena, y sobre todo mi agradecimiento. Quedan sus versos en el paladar de mi alma, donde los saboreo”.
Este largo poema al Cristo de Carrizo, que va recorriendo poéticamente sus manos, sus pies, su mirada, su silencio, comienza y finaliza con estos versos:
Naciste para estar sencillamente así sobre la cruz
Humano, entre los hombres.
[…]
Tú eres el Amor hecho presencia,
Amor hecho respuesta
a todas mis preguntas torturantes.
Los poemas de mis años de profesor y recitales en mis años de Salamanca, se extraviaron en un envío de mis cosas al Congo. A mi regreso de este país, felizmente me destinan a Mérida en donde viví seis años y fui cofundador de la Asociación poética Gallos quiebran albores, todavía hoy plena de vitalidad. En ella encontré el impulso definitivo de mi poesía y el magisterio de Rufino Félix Morillón y otros profesores.
CAMINO HACIA EL ALBA
En la Colección Emérita de Poesía de la Asociación Cultural Gallos quiebran albores, publiqué mi primer poemario: Caminos hacia el alba (1998), que no tiene un tema conductor, pues son vivencias experimentadas en diversas circunstancias de mi vida. Destacan los caminos de mi tierra: León y Castilla, mi larga estancia en África y paisajes extremeños.
El doctor en Filología hispánica Antonio Salguero Carvajal me regaló un amplio y profundo prólogo de 14 páginas en que analiza a fondo mis poemas (tarea que ha realizado con la mayoría de mis libros) y me define como el poeta de la luz y la esperanza.
Recogemos ahora unas pequeñas muestras de esas vivencias íntimas: Del primer capítulo escojo el Villancico titulado “Aquí nace la luz”:
Aquí nace la Luz… Aquí nace el Amor…
Aquí nace la Paz de un Niño que sonríe
para siempre en Belén.
De mi tierra de León y Castilla presento otro poemita premiado:
Me basta abrir los ojos para que brote el canto
y el corazón despierte la alegría.
De mi añorada África, recordemos esta viva estampa titulada “Madre africana”:
Transportando la carga de siglos de tristeza…
Dale también, Señor, una esperanza,
para el hijo que duerme
plácidamente en su espalda.
Finalmente de mi entrañable Mérida, escojo el final de una sentida oda que compuse a su patrona Santa Eulalia:
…Mientras Mérida sepa
mantener encendida la memoria
del horno… vivirás con nosotros
y brillará tu nombre,
en los cielos de Mérida.
EL DON DE LA PALABRA
Mi segundo poemario es el Don de la Palabra, premiado en Roma en 1999 con el premio Rielo. Es un himno a la Palabra-Verbo de poesía mística, del que destaco unos versos del poema “Cercanía de la Palabra” por la Encarnación de J.C.
No vienes de paseo a tu heredad…
quieres plantar tu tienda entre nosotros,
saber en propia carne qué es ser hombre,
bajar hasta el abismo sombrío de la muerte
para inundar de luz nuestras tinieblas.
Quieres hacer la misma ruta
y entablar con nosotros permanente
diálogo de amor.
OFICIO DE LA LUZ
En 2003 publiqué en la Imprenta Rejas de Mérida, para mi gusto, mi mejor poemario, Oficio de la luz, una exaltación del gozo de la luz. Fue propuesto para el Premio Nacional de Poesía, pero un cáncer galopante acabó con la vida del crítico oficial de radio y poeta berciano Antonio González Guerrero, que lo presentaba.
De este poemario destacaría el “Himno de la luz”, “Salmo del amanecer” y el Epílogo, titulado “Exaltación de la luz” al que pertenecen estos versos:
Se acabarán las sombras
del dolor, de la duda, de la noche.
y tú caminarás en tu propio esplendor…
Contigo subirán, transfiguradas, las cosas,
para estrenar los cielos nuevos
y para arder en ellos
con otra nueva luz inextinguible.
SIMBOLO Y PROFECÍA
Mi último libro de versos publicado en la Editorial PS fue Símbolo y Profecía en 2012. Es otra vez un canto a la vida y a la esperanza como bien dice sobre el libro un artículo editado en la Revista de Estudios Extremeños: “De Símbolo y profecía, lo primero que llama la atención es la portada, porque indica sin palabras, a través de imágenes, los dos rasgos definitorios de la personalidad del padre Miguel Combarros: su amor por la vida y su esperanza en Dios. Él está seguro, apoyado en el cimiento de su fe, de que el ser humano debe vivirla existencia con una actitud positiva, de agradecimiento a Dios por haberlo elegido para participar en esta apasionante aventura que es la existencia. El ser humano es naturaleza y, por este motivo, puede apreciar su grandiosidad y valorar el privilegio de formar parte de ella y de sentir, e incluso ver, a Dios en los símbolos que cotidianamente tiene al alcance de su entendimiento. Y este seguro convencimiento es el contenido que preside el poemario Símbolo y profecía” (ASC).
A través de símbolos naturales, de parábolas bíblicas y de otras imágenes sugerentes, el poeta penetra en ellas, las personaliza y recrea, sensible a la belleza de la creación y a la armonía del universo, abierto siempre a la inefable bondad trascendente de la divinidad. Ejemplo es el “Hijo pródigo” o la “Metáfora del Pan”:
Lo primero es el pan
metáfora perfecta
de los frutos copiosos de la tierra…
Está gritando amor. Es el pan del hogar
y nos procura la alegría de sentirnos hermanos a la mesa…
Danos siempre, Señor, este Pan-Sacramento
de nuestra Eucaristía
como una invitació
para el banquete eterno.
POEMAS PARA ORAR
Además he publicado otro libro de poemas titulado Poemas para orar (2004), que es una antología de poemas de múltiples poetas a los que les asigno la categoría de oraciones por su contenido, tono y significado trascendente, cuya presentación termina con estas gratificantes palabras:
“Sin duda, Poemas para orar, es de esos libros que nos acompañarán siempre, porque es un poemario que admite múltiples lecturas donde cualquiera que se acerque a orar encontrará nuevas emociones, que unas veces lo alentarán a superar un altibajo emocional, otras le ofrecerán la posibilidad de expresar a la par que el poeta sus preocupaciones y las más le proporcionarán orientaciones para allanar el camino hacia la luz colmándolo de esperanza” (ASC).
LIBROS EN PROSA
Y también he editado varios libros en prosa. Dios en África (Madrid, Mundo negro, 1993) es el resultado de mi experiencia de misionero en el Congo durante veintidós años y de conocer cómo se entiende la divinidad en aquel inmenso y apasionante continente. Es un libro que, como declaro en el prólogo, recoge y expresa tanto la negritud o valores de la tradición, como los métodos y frutos de la primera evangelización, el arraigo y porvenir del cristianismo en África negra: «Como una atmósfera que envuelve e ilumina el mundo bantú: la vida del hombre, la naturaleza con todos sus fenómenos, el pasado, el presente y el porvenir… hay que señalar su carácter fundamentalmente religioso y sacro. Para el negro africano ontología y religión se identifican o al menos son inseparables» (MCM).
¿Adónde vas …? (valores olvidados) (Madrid, Editorial PS, 2005) es un libro que recuerda esos conceptos hoy obviados y que, sin embargo, resultan tan necesarios en un mundo que se olvida muchas veces de lo más esencial como puede ser el respeto a la vida o el amor: «Nuestra vida debe estar marcada por la gratitud, por el don, por la gracia, por el amor agradecido y gratuito, a ejemplo de una madre. ¿Pide acaso una madre paga o recompensa por cuidar a su hijo y educarlo para la vida?» (MCM).
Vivir el Padrenuestro (Madrid, Perpetuo Socorro, 2013) ha sido comentado de esta manera: “No tenía previsto comentar en mi blog libros que no fueran estrictamente literarios, pero Vivir el Padrenuestro, para mí, no es un libro cualquiera sino un libro del Padre Miguel Combarros y quiero hacer una excepción con él porque, para mí, leer cualquier escrito del “poeta de la luz y de la esperanza” (como hace años lo bauticé), es una auténtica delicia, un bálsamo para mi espíritu (y más en la actualidad): “El pan es el alimento básico de millones de seres humanos. Carecer de pan es carecer de todo: de salud, de fuerza, de alegría … En la metáfora del pan entran el maíz, el arroz, la yuca o la mandioca, […] También el vestido, la casa, el trabajo” (MCM).
Afrontar la vida (Madrid, Perpetuo Socorro, 2013) es un libro cuyo contenido aporta claves para poder hacer frente a la existencia de un modo equilibrado en todo tipo de momentos y, por este motivo, supone una buena orientación para enfrentarse a las distintas situaciones que se presentan en la vida cotidiana y buscar soluciones: «La austeridad de la vida es la respuesta o réplica al materialismo que subyace en las bases del consumismo» (MCM).
Dones y virtudes olvidadas (Zaragoza, Misioneros Redentoristas, 2015) tiene un contenido con el sentido que descubre este comentario: “Cumple este libro la misma función que la literatura didáctica medieval que, procedente de las culturas milenarias de Oriente, aconsejaban cómo actuar ante las distintas situaciones, casos y hechos de la vida cotidiana y hoy, sin embargo, que la realidad es muchísimo más compleja, nos obliga a tomar decisiones continuamente y estamos necesitados de guía y luz, nadie necesita consejos pues todos nos creemos autosuficientes y muy seguros de tomar siempre la decisión correcta y así nos va…” (ASC).
Regreso al Paraíso (Astorga, autoedición, 2017) es un canto a la vida en forma de librito de poemas repleto de luz y de esperanza, donde el poeta acentúa su canto a la existencia con mayor gozo, si cabe: «Benditas seas tú, agua cristalina, / que brotas de las fuentes y de las nieves / y corres presurosa para servir al hombre / y regar los jardines / […] / Qué bello aquel desfile del Génesis / ante Adán y Noé tan asombrados / en la tierra estrenada / y después del diluvio renacida. / […] / Colgó después sus ojos en la noche / para contar estrellas; / mas le faltaban números: / tanta luz no cabía en sus pupilas».
Pero, como es habitual en el padre Miguel Combarros, no se olvida de las sufrientes mujeres que conoció en su etapa misionera del Congo: «Yo tengo en la retina la tragedia / de madres africanas / que tienen que lavar a sus recién / nacidos en charcas corrompidas». Tampoco ignora la falta de paz en el mundo: «Mansa paloma blanca, / sigue volando entre cañones y bombas / y tráenos en tu pico la paz y la esperanza». Y destaca, como siempre, la inmensa bondad del autor de la creación que ha concedido al ser humano dones sencillos y, a la vez, grandiosos, muestras de su bondad y de su grandeza creadora: «Tu Palabra, Señor, es la llovizna / que mansamente va calando la tierra / transforma la pradera y reverdecen / los campos y trigales, que se visten / de amapolas y blancas margaritas». (ASC)
Siguiendo tus huellas (I)(Astorga, ciber@stor, 2017) ha sugerido este juicio: «Siguiendo tus huellas es un librito de poemas que contiene una declaración espiritual del amor sentido por el poeta hacia la Virgen María y Jesucristo, ahora que, por su cercanía a ellos debido a la edad, necesita de su guía, su apoyo y su protección: El tiempo nos alcanza y nos avisa / que se acerca la hora de cruzar / a la otra orilla. / Por eso te pedimos / que no nos dejes solos / en ese duro trance. // Estoy seguro de que estás a nuestro lado, / lo mismo que tu Madre («Orfandad: No os dejaré huérfanos»).
No pierde la oportunidad Miguel Combarros de difundir su sempiterna mirada positiva de la existencia cantando, como es costumbre en él, a la vida: La vida es el gran regalo que Dios nos hace. / Él es fuente de vida y felicidad. / […] Me lo dicen los mirlos madrugadores. / Y hasta el perfume de las flores que despiertan para saludar al rey del universo («Gracias por el nuevo día»). De ahí esa gozosa referencia a su querida y recordada estancia en Mérida, cuando fundó con unos amigos la tertulia literaria Gallos quiebran albores: Aunque es de noche, / está rompiendo el alba / y quiebran albores de gozo / los gallos a porfía («Aunque es de noche»).
Por ese motivo, siempre resulta agradable leer los versos luminosos y esperanzados del padre Miguel Combarros no solo por líricos (Háblame así, Señor, / en silencio, sin palabras / como leve caricia de la brisa / que reparte el perfume entre las flores. Como el canto gozoso del rocío / que despierta y refresca la mañana -«Háblame así, Señor«-) sino también por ser versos cargados de existencia vivida hasta el punto de impregnarse muchos de ellos de preocupación social: Tú que conoces bien las corruptelas / de nuestra sociedad / y tienes el remedio a nuestros males / no nos abandones ni nos dejes solos / pues nos pierden nuestra sobrebia y egoísmo («Madre asunta») (ASC).
Siguiendo tus pasos(Astorga, ciber@stor, 2018) es un librito que comienza con una magnífica muestra de la poesía esperanzada del padre Miguel Combarros pues, como se puede observar, el poeta no recuerda la infancia con nostálgica melancolía sino con un sentido gozo, que lo lleva a evocar los símbolos religiosos que presidieron su infancia y son el origen de su entrega a Dios y a los demás: «Por fin han llegado las lluvias y la nieve / a coronar la realeza del Teleno, / el mejor anticipo de la primavera. // Verdean los trigales como alfombra / real. Y bailan en las torcas los conejos. / Revivo mi infancia de inocentes / travesuras. Y todo gira en torno / al campanario y a la iglesia.».
Son versos reconfortantes, llenos de un profundo amor a la vida y de disfrute por poder sentir una fuerte emoción ante la belleza que se le regala: «Qué solaz disfrutar de esos rosetones que nos entregan la belleza de Dios acumulada en símbolos e imágenes bíblicas».
Siguiendo tus pasos es un poemario que reconforta de principio a fin y sucede esto porque el padre Miguel Combarros, seguro en su fe, se reafirma en asegurar que es posible vivir la vida, a pesar de los pesares, con un talante positivo confiando en Dios que, incluso, nos permite abrigar sueños de un mundo más habitable: «Siempre es posible soñar, / encender una estrella / que ilumine caminos de verdad / y de belleza. Siempre es posible soñar / y crear paraísos.». (ASC)
Son tus huellas el camino(Astorga, ciber@stor, 2018) es otro librito que, editado de modo artesanal, está lleno de versos ilusionados en la seguridad que tiene el padre Miguel Combarros de continuar su camino acompañado por la presencia de Dios (de ahí el título machadiano), en el grato entorno natural de su infancia y adolescencia en su tierra de León.
Por este motivo en sus versos aparece destacada su referencia geográfica, el Teleno, vigía de aquellos parajes que acogieron sus juegos de niño, ahora retenidos por su mente y su emoción, como recién realizados, entre sus más preciados recuerdos…
Han llegado por fin las lluvias y las nieves a coronar la realeza del Teleno
el mejor anticipo de la primavera.
Respira de nuevo el agostado Tuerto
con sus truchas, sus ranas y cangrejos.
Verdean los trigales como alfombra
real y bailan en las torcas los conejos.
Hoy revivo mi infancia de inocentes
travesuras. Todo gira en torno
al campanario y a la iglesia, al monte y al río.
…siempre dispuesto a llenarse del gozo de la presencia de Dios y, por eso mismo, siempre animado a gozar de una percepción gratificante de la existencia, como buen poeta de la luz y de la esperanza:
Esta es mi tierra. Aquí pasé mi infanciay aquí estoy solo contemplando el río
Envíame siempre al Paráclito defensor
que me ilumine y fortalezca y que me enseñe
la auténtica sabiduría de servir al Señor de la Vida
y la felicidad.
(ASC)
África: Vida y llanto(Astorga, ciber@stor, 2019) es un poemario con 14 poemas, de los cuales la mitad son de su extraordinario libro Caminos hacia el alba, donde recogió su experiencia de 22 años como misionero en África.
En sus versos aparecen imágenes del grandioso paisaje africano, que ha quedado grabado sólida y amorosamente en el baúl de su emoción y, paralelamente, también sobresalen duras críticas contra el hambre, que afecta especialmente a los niños, contra la situación opresiva de la mujer africana y el preocupante atraso que sufre África por la corrupción de gobernantes propios y depredadores foráneos:
Hoy levanto mis versos
por encima del tiempo y de la noche
para cantarte ati, África mía.
Todo es sagrado en ti, todo es fecundo
porque acunas a Dios en tu regazo.
[…]
Porque sabes cantar en la desgracia,
porque el ritmo navega por tus venas,
[…]
porque tienes abiertas de par en par tu choza
y sabes compartir porque eres pobre;
porque nadie es forastero, sino hermano,
África yo te canto,
África sagrada y solidaria.
(ASC)
MI POÉTICA
Prefiero el verso libre, mezcla de endecasílabos y heptasílabos y de cinco sílabas, porque da una gran libertad; pero admiro a los sonetistas que escogen el camino más difícil y condensan quizás mejor el pensamiento. Pero ¡ojo! presto toda la atención a la sonoridad del endecasílabo que exige una acentuación perfecta de sexta o de cuarta y octava.
Para mí la poesía, como para todo poeta, es la comunicación de un mensaje; en mi caso religioso, porque escribo versos como un complemento a mi apostolado. Dios es la fuente de la armonía y de la belleza y trato de hablar con Él y orar con el lenguaje más bello, que después de la música, es la poesía. Me da mucha alegría saber que hay personas que oran con mis salmos.
En el poema no puede faltar el sentimiento, el corazón, que es más eficaz que la inteligencia o la idea. Sentimiento y símbolos, imágenes o tropos, constituyen el poema. Así el mensaje llegará al lector y le conmoverá por su belleza.
Miguel Combarros Miguélez
Fotografía cabecera: Jerez de los Caballeros
En la Web del Homenaje de sus amigos de la Tertulia «Gallos Quiebran Albores» se dice:
Miguel nos dejó el 28 de enero de 2021 en su tierra, Astorga, tras haber dejado sembrados en Extremadura y África, sus versos, sus enseñanzas y su pasión por la vida.
Soy José Manuel Sito Lerate. El punto de partida de mi vocación poética, fueron mis lecturas siendo joven, de los escritores extremeños: Manuel Pacheco (con el que mantuve una gran amistad), Luis Álvarez Lencero y Jesús Delgado Valhondo, así como de Luis Chamizo y de los escritores de otros puntos de la geografía nacional como Miguel Hernández, Federico García Lorca, Antonio Machado, Blas de Otero, Gabriel Celaya, y de fuera de nuestras fronteras -porque los poetas no tienen fronteras-, de Edgar Allan Poe, Pablo Neruda, Bertolt Brecht, Walt Whitman y otros muchos, en realidad mi sueño como escritor aún es, siempre lo será, porque siempre lo fue, que algún día alguien me lea con tanta voracidad, entusiasmo y asombro, como yo leí a todos estos poetas en mi juventud.
La influencia de mi tío Manuel Sito Alba, profesor de lengua y literatura, dramaturgo, y catedrático de universidad de Historia del Teatro, también fue muy importante en mi vocación artística y literaria. Algo que me influyó desde niño en esta doble vocación de actor y poeta, fue la participación en actos escolares, como cuando recité “Mi vaquerillo” de Gabriel y Galán a los diez años en el colegio de los Hermanos Maristas de Badajoz, o cuando interpreté algunos fragmentos de La venganza de don Mendo, en los colegios Salesianos de Mérida y Badajoz.
No obstante, yo comencé a escribir en serio poesía a la edad de treinta años, cuando me aparté un poco de mi profesión de actor y profesor de teatro (o hice un paréntesis profesional que me ha durado hasta ahora). Durante estos últimos veintitantos años en que escribí a diario toqué los más diversos temas (por esto más de la mitad de mi producción no la conforman poemarios concretos, sino que es un vasto poemario de muchos temas). Y escribí verso libre y rima siendo esta última el 70% de mi obra y, aunque nunca he dejado de tener alas para el verso libre, en la rima me encuentro como pez en el agua.
Sin embargo, a los veintiún años escribí un primer cuadernillo de poesía experimental, que me prologó el escritor Miguel Murillo, pero en realidad eso fue sólo un experimento, pues mi obra comienza más tarde a los treinta años, cuando escribí mucho en primera persona, con forma y formato clásico pero con temas y lenguaje moderno, y escribí por necesidad de expresar lo que pienso y lo que siento y, si unas veces escribí de forma vital como desahogo y terapia, otras veces lo hice como deber para con los demás. No obstante escribí de mí de forma intimista y pongo ahora unos ejemplos: sobre el amor y la angustia de ser y de estar, otras veces lo hice de forma más general: sobre los conquistadores extremeños o sobre la pesadilla del terrorismo de ETA.
POÉTICA
Haciendo una reflexión sobre mis ideas teóricas que usé al escribir poesía, diré que yo escribí sobre mi propia percepción o presencia en el mundo, y en general escribí de los vaivenes de la existencia, pero con una hipersensibilidad que en el terreno poético me ha sido muy válida para crear, aunque en el terreno vital y emocional del día a día, algunas veces me ha supuesto un gran estremecimiento personal.
Dicen, yo no lo niego, que lo que escribo es la uña de la carne con que recito, mi oficio de actor y mi voz de rapsoda me han sido muy útiles para comunicar lo que dicen mis versos, esta dualidad a la hora de valorar mis méritos, (si los tengo) me complementa y no está en pugna lo uno con lo otro, soy poeta y actor y eso es un todo.
He de advertir que yo no soy un poeta a la moda, por eso también escribí mucho con rima, la cual dice algún snob que ya no se lleva, y desde luego está denostada de mala manera, pero yo me niego a ser un poeta que escribe solamente para otros poetas, yo escribo para todos, para las minorías y para las mayorías y, si a veces a lo mejor hago una poesía más culta y exquisita, no está reñida con el lector en general, sobre todo porque otras veces hago una poesía de tono más popular y nada oscura.
He tocado todos los temas que me han interesado o impactado, ya sea en poemarios homogéneos o en poemas sueltos y, si mi poesía ha sido muchas veces intimista, otras veces ha sido todo lo contrario. Yo hago una poesía sobria pero no carente de recursos, ni de adornos, ni de metáforas nuevas, y es que como por otra parte yo no quiero ser un poeta almibarado, por eso es esta sobriedad.
He escrito sonetos, redondillas, liras, poemas alejandrinos, son ejemplos, y siempre me encontré a gusto ya fuera escribiendo en endecasílabos, en octosílabos, o en heptasílabos, etcétera, pero en el verso libre también he encontrado un buen formato, para hablar pongo por caso, del Alzhéimer, de la niñez, del amor o la muerte.
Todo esto lo compaginé con el teatro, pues paralelamente escribí catorce obras de teatro, y estrené una de ellas con el grupo de teatro Suripanta obra que titulé “LA ISLA DE LOS SAPOS”, así como también escribí narrativa y artículos, publicados en la revista “EL ANCLA”, el diario “HOY” y en las publicaciones del “VUELO DE LA PALABRA”, y escenifiqué varios sketch de teatro de los que soy autor con “EL GRUPO DE TEATRO DE LOS SÍES MÁGICOS” el cual dirijo, recibí la “T” de tolerante premio que me concedió la concejalía de juventud del Ayuntamiento de Mérida, por un artículo publicado en el diario “HOY” el cual lleva por título, “XENOFOBIA Y OTRAS ANIMADVERSIONES NACIONALES”, por otra parte como poeta fui por tres veces “POETA DE HONOR DEL GRUPO DE LOS ENAMORADOS DE EXTREMADURA” y otra vez gané el premio al mejor rapsoda, así como también obtuve el premio de poesía, “DOCTOR JOSÉ LUIS SÁNCHEZ PRIETO”.
Mi biografía por lo demás es alternar como actor y escritor: algún montaje de teatro mío o de otros dramaturgos, recitales de poesías míos o de otros poetas, publicaciones de textos, programas radiofónicos sobre poesía que dirigí y en los que fui presentador, y clases de teatro a jóvenes y adultos.
Mi amor a la literatura y al arte es pasional, y ya sin crear no puedo decir que existo (vivo por y para el arte, como si este fuera el único oxígeno que me mueve y el único aire que respiro el cual no se dejó contaminar).
En realidad he escrito como dijo el poeta, sobre “La vida, el amor y la muerte”, en mi caso de forma biográfica la mayor parte de las ocasiones (porque a veces es cierto que hable yo como poeta de lo que hable, lo que escribo es una biografía de mis sentimientos y de mi percepción de las cosas), aunque inspiración, con mayor o menor acierto, no me ha faltado nunca cuando me he puesto ante el papel a escribir, y he publicado cuatro libros de poemas, los cuatro de temas diversos, mas lo que he publicado en estos libros, ha sido sólo la primera parte, prólogo o avanzadilla, de lo que queda guardado en el cajón, que espero será algún día parte entera y poemarios completos (pues la mayor parte de mi obra está inédita)
COMPOSICIÓN POÉTICA SIGLO XX
Así se titula el primer libro que publiqué en el año 1983, con un excelente prólogo del dramaturgo Miguel Murillo, lo imprimió la imprenta Campini con ilustraciones de José Manuel S. Paulete, los dos poemas principales son “LA MUELA DEL JUICIO”, y “LE DIVIN CHAMPAGNE”, con un poema corto que abre el libro presentándolo, titulado “LA MÚSICA DE LAS PALABRAS”, y otro que lo cierra titulado “SABROSO MENÚ”.
Parte de la edición de estos libros la tenía guardada en el altillo de un armario, porque no sabía si esta obra sumaba o restaba, mas como últimamente varias personas, entre ellos algunos poetas han encontrado ejemplares del mismo en bibliotecas y librerías de Badajoz, y ante el interés suscitado por susodicha composición, tomo en cuenta mi primer libro como eso, como un experimento pero que también es algo más.
Transcribo algunas palabras de Miguel Murillo, autor del prólogo: “Dudo mucho de que estos poemas se aprendan en las escuelas ¿por qué no?, de la misma manera dudo que Rimbaud no salte de envidia en su tumba, y Manuel Pacheco no lo llame cachondo-hermoso-romántico-altivo- masturbador-intolerable-rebelde-sacerdote.
José Manuel Sito intenta introducir en el ritmo verbal que impera, la llama de lo que se transforma y surge con vida, se sale de la academia y de los diccionarios. Sinfonía absurda, sentimental a veces, colorista y llena de saltos al vacío, encadenados por una obsesión, la huida del verbo convencional, la persecución de un lenguaje nuevo.”
A continuación, escrito a modo de presentación ahí va el poema que abre el libro.
LA MÚSICA DE LAS PALABRAS
Palabras: reinado azul de melodías eternas,
conjunto musical de matices y tonos,
dibujos en forma de paloma-mensaje,
de cuervo-mensaje, de colibrí-mensaje.
Las letras alaridos, las letras desdén,
los vocablos soledades, aparentes rompecabezas
de inconscientes-conscientes, conceptos ocultos,
acentos, puntos y comas, palabras en suspense.
¡Oh lógicas deducciones del anárquico orden perfecto
de la naturaleza!, palabras cosidas en un guante,
letras en un sombrero sorpresa de prestidigitador,
y todas las palabras bajo una carpa corriendo divertidas
por la pista, y entre los espectadores vocales y consonantes
riendo emotivas o pensando respectivamente.
Ya está la orquesta preparada para dar vida a LA
COMPOSICIÓN POÉTICA SIGLO XX, el director levanta la
Batuta, y coro y solistas entonan sus textos.
Entre candilejas el autor murmura: –¡palabras!, reinado
azul de melodías eternas-.
EL ALA DE TU FUGA
Este libro lo publiqué en 1984, y lo hice en colaboración con “LA REAL SOCIEDAD ECONÓMICA EXTREMEÑA DE AMIGOS DEL PAÍS”, libro que aunque lleva por título “EL ALA DE TU FUGA”, está dividido en otras dos partes más: “MI MISTICISMO”, y “YO UN POETA INÉDITO”, el libro tiene 65 páginas, la impresión la hizo “Tecnigraf S. A. y salió a la calle en “La Feria del libro de Badajoz de 1994”, siendo según la librería Alianza el segundo libro más vendido en esa feria del libro, tiene una fotografía muy expresiva en la portada, en blanco y negro, de mis manos y de mi rostro.
“EL ALA DE TU FUGA” son 14 poemas extraídos del poemario más extenso e inédito también llamado “EL ALA DE TU FUGA”, son poemas de amor y trata de una separación y ruptura traumática, de un amor perdido y muy sentido que causa dolor al poeta pero que aún le inspira, once son sonetos, pero también hay tres poemas más de distinta medida, la segunda parte del libro “MI MISTICISMO” reúne algunos poemas religiosos, la tercera parte en que está dividido el libro se llama “YO UN POETA INÉDITO”, y son 16 poemas de distintas temáticas.
El libro comienza con una presentación hecha por mi amigo el pintor, doctor en Filosofía y Letras, y presidente de la Real Sociedad Económica Extremeña de Amigos del País, Francisco Pedraja, luego le sigue un prólogo titulado, “UN POETA INÉDITO: JOSÉ MANUEL SITO LERATE, donde el catedrático de lengua y literatura Pablo Fernández García, habla a fondo de mi obra añadiendo también algunos datos biográficos, extraigo del prologo los últimos renglones: “Ahora bien, esta sobriedad y sencillez expresiva no debe inducirnos a pensar que se trata de una poesía ramplona o carente de adornos; nada más lejos de la realidad. Las abundantes figuras del plano léxico-semántico y los tropos son ingredientes necesarios en una poesía cuyos términos están pensados y sometidos a una rigurosa selección. Las antítesis, metonimias, símiles y metáforas son relativamente frecuentes. Frases como “amor encanecido”, designar a la muerte como “ascensión a lo divino” o como “el último renglón de los renglones” –para no extendernos demasiado en las citas- son muestras evidentes de la riqueza expresiva.
Como conclusión, diremos que la poesía de José Manuel Sito es serena, firme, que evoca y sugiere. Su verso discurre amplio y sonoro, acompasado con una sosegada inspiración, que provoca una profunda vibración en el espíritu. Desde aquí deseamos que se convierta pronto en una de las firmes realidades poéticas de nuestra región”.
Para acabar diré que el crítico literario del Diario “HOY”, Antonio Zoido, en su momento me hizo una crítica entusiasta del poemario, donde elogió abundantemente mi obra. Sólo me queda por añadir la dedicatoria que lleva el libro: “A mí tío, MANUEL SITO ALBA, catedrático de lengua y literatura y autor teatral, del que heredé mi vocación literaria”. A continuación un poema del libro.
FALTA NADA
Amada mía, simple beso vale,
y no hay dicha que amor no restituya,
y no hay dicha que pena la destruya,
y si del corazón besar te sale.
Que tu risa de amor, amor señale,
que tu risa de amor, amor construya;
que esa risa de amor tan sólo tuya,
a mi risa de amor, amor iguale.
Que esa risa de amor es tu derecho,
que es derecho de amor si yo la miro,
y derecho es de amor esa mirada,
Bastas tú, basto yo, y amor es hecho,
basta amor y de amor sólo un suspiro,
basta amor, basta amor, y falta nada.
Estos versos están en la página 31 del libro, y del poeta aquí se aprecia que está tan enamorado del amor, como de quien ama, y sublima lo que escribe.
POEMAS ESCOGIDOS
Es un libro muy breve, que se publicó en BIBLIOTECA GENERAL CORONA DEL SUR en 1998, son sólo nueve poemas y la edición que se hizo de 300 ejemplares, se repartió entre los socios de LA Real Sociedad Económica Extremeña de Amigos del País, son de diferente temática, y a continuación puedes leer el soneto que también va en la contracubierta.
VASO DESNUDO
Palomares tus manos de palomas,
y de un huerto tus manos son dos ramas,
corazones los nuestros con dos llamas,
que tienen faltamente sus carcomas.
Si es tu palabra espejo donde asomas,
y cual vaso desnudo te derramas,
yo me asomo al cristal donde te inflamas,
abriendo labios y palpando lomas.
Cerrando labios y palpando valles
hasta hacerte temblar como a una rosa,
mas luego ni me preguntes ni me halles,
que etéreo me habré vuelto, leve cosa,
o estaré en los jardines de Versalles,
convertido de oruga en mariposa
EL TODO DE MI NADA
Este poemario lo imprimió en el año 2001 “BIBLIOTECA GENERAL CORONA DEL SUR” en Málaga, y empieza con unas breves palabras mías que llamo “UNAS PALABRAS DEL AUTOR”, le sigue una semblanza biográfica hecha por el poeta y amigo Plácido Ramírez Carrillo, que termina así: “Sus versos están marcados por la musicalidad y el ritmo propio de un alma dotada de sensibilidad exquisita. Estamos ante un poeta que dice las cosas como son, con su voz fuerte, clara y cálida a la vez”. A continuación se puede leer un poema de la poetisa y amiga Milagrosa Ortega, titulado “DETRÁS DE TU FOTOGRAFÍA”, donde Milagrosa busca desentrañar lo que hay detrás de la foto de la portada de mi anterior libro “EL ALA DE TU FUGA”, es decir de la instantánea que muestra mi rostro y mis manos. Finalmente se pueden leer unas palabras de la poetisa y amiga entrañable Estrella Doncel, desgraciadamente ya fallecida, entresaco lo siguiente: “Compañero de recitales, José Manuel cada día me sorprende más gratamente, pues a la calidad de sus escritos acompaña su sonora y profunda voz al declamar, fruto de su preparación en Arte Dramático. Me cabe el honor de ser amiga suya, pero además me siento su admiradora”.
EL TODO DE MI NADA son 25 poemas de diferentes temáticas: religiosa, amorosa, biográfica, alguno de tema popular, etcétera, que es una selección de poesías muy rigurosa entre las que destaco: “TOPÉ CON DIOS”, “ANTE EL CRISTO DE VELÁZQUEZ”, “LA PIEDAD”, otro poema que destaca es “QUEDA EL RÍO” en recuerdo del gran poeta y amigo entrañable Manuel Pacheco, concretamente trata del día en que arrojaron sus cenizas al río Guadiana, que este poema es mi personal y sentida despedida, hay también un poema de versificación libre “YO CANTO”, otros poemas a tener en cuenta son: “CANTAR DE MARINEROS”, “EL TODO DE MI NADA”, y “LAS MENTIRAS DEL ECO”.
De mis cuatro libros publicados “EL TODO DE MI NADA” es el tercero en extensión, solamente tiene 50 páginas, y lleva una dedicatoria, “A MI MADRE, EL OTRO TODO DE MI NADA”. A continuación un poema del libro.
ANTE EL CRISTO DE VELÁZQUEZ
No se ve tras del pelo su mirada,
sonrisa no se ve, no es la Gioconda,
no se ve su expresión, (la muerte ronda)
no se ve su expresión, (rosa tapiada)
Cabello negro sobre faz tapada,
mas si muerte rizó el rizo ni una onda,
(la muerte no es cuadrada ni redonda,
que la muerte sólo es amoratada)
Si el cabello que cae mucho se humilla,
si este Cristo sin cara nos asombra,
este rostro de Cristo es el más cierto.
Si este Cristo sin rostro maravilla,
si este cuerpo sin rostro a Jesús nombra,
este ser tras del pelo es Jesús muerto.
“ANTE EL CRISTO DE VELÁZQUEZ”, página 41, es un soneto que cuando lo publiqué en la revista “CIUDAD ABIERTA”, le llamó mucho la atención al profesor de literatura Manuel Pecellín Lancharro, y en esto de los sonetos ya se sabe, muchas veces te quedas a las puertas, y sólo algunas aciertas del todo. El poema no hace falta explicarlo, y del cuadro de Velázquez sólo añadiré: que está insinuación del rostro o la falta del mismo, es el rostro de Jesús que tenemos más cierto, y en este sentido todo lo demás son pinceladas al aire.
UNA SUMA DE SILENCIOS
Este libro es el más extenso, tiene 132 páginas, y lo imprimió I. B. Graficas en 2005, la composición de la portada es creación mía, y digamos que el silencio de “UNA SUMA DE SILENCIOS” duró el tiempo que tardé en escribirlo, que ese silencio se rompió al ser publicado el libro, y ser recitado o leído en voz alta por los lectores, el prólogo es del escritor Francisco Lebrato Fuentes, y extraigo los últimos renglones del mismo: “La obra queda para ser leída, sentida. Yo no suelo sacar versos del camarote del libro: el libro está para leerlo. José Manuel Sito Lerate, actor, director de escena, autor teatral, narrador, articulista con premios que lo acreditan; en este caso ¿tiene el poeta más que decir?, ¿calla el hombre lo que todavía no ha dicho? El silencio es suyo, la voz también. El lector lea y escuche. Yo entre todo esto, vuelvo al principio preguntándome, -¿Cuándo conocí a José Manuel Sito Lerate?, -Como nunca, mejor que nunca, cuando acabo de leer este libro.
Ahora continuo explicando que el libro está dividido en ocho partes: La primera “CONDENA ENTERA” son tres poemas sobre la banda terrorista ETA, y de homenaje a las víctimas del terrorismo, la segunda parte “POETA CORAJE” son cinco poemas de poesía social, aunque yo lo de poeta social lo escribo con mucho respeto, la tercera parte son diez poemas y nanas, la cuarta parte la llamé “PREGUNTAS”, la quinta parte que son cinco poemas la titulé “A ALGUIEN”, y la escribí pensando en personas con nombres y apellidos concretos, nombres que no figuran en el libro, lo que tampoco hizo falta pues personas como estas son identificables y las hay en todas partes, la sexta parte son ocho poemas que los titulé “SUEÑOS”, y aunque no lo pone en el libro es un homenaje a Salvador Dalí, la séptima parte “A BADAJOZ” son once poemas dedicados a la ciudad donde nací, y en la cual ya llevo más de medio siglo viviendo, y la última parte la octava, son quince poesías tituladas “OTROS POEMAS”, donde también hay algunos versos libres que tocan diversas temáticas. El libro tiene una dedicatoria: “A MI HERMANA QUE SIEMPRE LLENÓ DE PALABRAS DE ÁNIMO ESTA “SUMA DE SILENCIOS”. A continuación un poema del libro.
PASEO POR LA ESTACIÓN DE BADAJOZ
Sobre un banco de madera
sentado, un viejo procura
liar, en la sala de espera,
tabaco de picadura.
En una jaula, ya vieja,
lleva un viajero un canario,
canta el pájaro entre rejas,
el hombre habla en solitario.
Mi niñez he revivido
al pasear, cuando pensaba
que tanto vagón unido
era un ciempiés que viajaba.
Mientras vi por los andenes
donde jugaba a los cromos,
entre el humo de los trenes
dos soldaditos de plomo.
¡Fantasía desvanecida
en mis ojos visionarios!,
tras la humareda extinguida
de gala dos legionarios.
Que la infancia he recordado,
no retorna, sigo el viaje,
mas viajero enamorado
y el corazón de equipaje.
Y algún día, -he meditado-,
en vía muerta, frío, inerte,
como un tren descarrilado
me habrá de oxidar la muerte.
Este poema “PASEO POR LA ESTACIÓN DE BADAJOZ”, página 94, aún me trae recuerdos de un lugar para mí tan vivo y sugerente, e incluso tan entrañable, como es una estación de tren, que además en este caso recuerdos muy próximos porque es la de Badajoz, y debo decir que este poema le encantaba al gran poeta y amigo ya fallecido, Antonio Román Diez, pues no fallaba, siempre que nos encontrábamos me decía, -«José Manuel, ese poema tuyo es de diez»-, y aunque no me daba matricula yo me siento aún muy orgulloso de ese sobresaliente, que no me lo daba sólo el maestro de escuela que él era, sino sobre todo un verdadero maestro en el arte de hacer rimar las fibras del lenguaje, (cuanto aprendo aún leyendo un soneto suyo)
Otra de las influencias en mi poesía, fueron mis estudios de tres años, en la REAL ESCUELA SUPERIOR DE ARTE DRAMÁTICO DE MADRID, donde los alumnos recitábamos a menudo a los grandes poetas españoles, y a otros de fuera de nuestras fronteras, -y todos ellos universales-, de hecho en el examen de ingreso para entrar en dicha escuela, tuve que interpretar entre otros textos, la elegía a Ramón Sijé de Miguel Hernández, lo que fue como un talismán para mí ya que siempre fui gran admirador de éste poeta.
Para acabar diré exagerando, a la vez que bromeando, que ya no cuento el tiempo pasado en fechas del calendario, sino en recitales de poesía y publicaciones, y también como no, en sketch y montajes de teatro.
PAJARITA CIEGA
Este libro, editado en 2016, lleva también el siguiente subtitulo, “EL EXAMEN DE NINGUNA RESPUESTA A UN CIENTO DE PREGUNTAS”. Se publicó enCORONA DEL SUR, las imágenes de la portada: dos moscas y un signo de interrogación son también aportación mía. La dedicatoria dice así, “A todos los escritores no reconocidos en vida, y valorados después de muertos. Y a los lectores que tuvieron el valor de abrir esos libros olvidados y polvorientos”.
Son diecinueve poemas en endecasílabos, y para explicar su contenido me remito a fragmentos del prologo, del que es autor el profesor de filosofía Faustino Lobato.
“Tienes en tus manos un puñado de versos, que hablan de las inquietudes universales de cualquier mortal bajo la sombra de la pregunta. Y es a través de la pregunta machacona e insistente de un yo lírico, como el poeta intentará introducirte en una densa reflexión, donde la respuesta puede parecer una extravagancia.
Te recomiendo, a ti lector que te atreves a pisar el umbral de esta obra, que no tengas prisas por avanzar y terminar. Al comenzar hazlo despacio y sin reparos, déjate mecer por las preguntas que nuestro autor lanza, y en el silencio -que muchas de ellas provocan- procura descubrir las propias preguntas, esas que tú y yo no nos atrevemos a hacer a los otros y mucho menos a hacernos”.
La contracubierta del libro contiene algunos datos biográficos míos, y este libro ha suscitado gran interés entre los lectores. El continente de versos muy medidos es de corte clásico, para un contenido que ya puedo atreverme a aventurar es muy especial.
A continuación el primer poema con que comienza el libro, titulado igual que el libro.
PAJARITA CIEGA
¿Por qué silencio borra con su goma
frase que en el papel aún no está escrita,
por qué frase de amor se borra y quita
antes de escribir punto o poner coma?
¿Por qué si beso fue tan buen aroma,
aroma que tragué mal regurgita?,
(mas beso en realidad fugaz visita
que me dejó en el alma un hematoma)
¿Por qué me trago lengua y ya no asoma
a los labios, que diablos precipita
epiléptico ataque al que vomita
las mejores salivas del idioma?
¿Qué estrangula y en serio, pues no es broma,
este poemario azul, qué resucita
de la tartamudez al que recita,
y en que página verso se retoma?
¿Qué frase que aún no dije nadie doma,
que trasunto de amor que no se edita,
titiritando está donde tirita,
qué termita lo muerde, qué carcoma?
¿Y qué camino que no lleva a Roma,
me llevará a la senda que transita
un corazón que vuela y que palpita,
que no es de cormorán, que es de paloma?
¿Qué abismo que es abismo, pero es loma,
tiene un eco que es eco, mas no grita,
y que voz que es mi voz pero me evita,
ha premiado a la luna con diploma?
¿Qué corazón no de manzana o poma,
-corazón en que no sobra pepita-,
pero le falta algo que necesita,
algo le duele en cada cromosoma?
Si en mirada de ayer vista un glaucoma,
hoy lo mismo que ayer, ¿luz dónde habita?,
-ciega en papiroflexia hay pajarita-,
(que ojo siempre verá es un falso axioma)
TOPÉ CON DIOS (Poemas para rezar declamando)
Este librolo publicaCORONA DEL SUR, tiene 95 páginas, se acabó de imprimir el 26 de Enero de 2.017, la ilustración de la portada es el Cristo de Velázquez, y está dedicado “A LOS QUE ME ENSEÑARON A TOPARME CON DIOS”.
El prólogo es de Alberto González Rodríguez, cronista oficial de la ciudad de Badajoz. Sus 95 páginas lo son de poemas religiosos y la contracubierta contiene algunos de mis datos biográficos literarios y artísticos más relevantes. En los siguientes fragmentos del prólogo dice así el prologuista:
“TOPÉ CON DIOS”. Poemas para rezar declamando”, como el propio título anuncia y “Mi VERSO ES ORACIÓN” ratifica después, es obra de inspiración religiosa en la que el autor desliza convicciones y creencias del más hondo sentimiento. Leer a José Manuel Sito, es un regalo para el espíritu ofrecidos en sus cuidados versos, de tan honda sinceridad como hermosa construcción, plagados de armónicas construcciones, sugestivas imágenes y otros aciertos en los que se evidencia el dominio de la preceptiva como instrumentos insoslayable para transmitir bien lo que se quiere decir, con la envoltura de la mejor expresión literaria. Con dicho bagaje José Manuel Sito se refiere al mundo de sus convicciones de manera sencilla, inteligible y directa, transmitiendo sosiego, armonía, paz y sinceridad, al tiempo que reclama compromiso, bajo una cuidada expresión literaria.
A continuación un soneto que según se dice en el prólogo es uno de mis más logrados sonetos religiosos, compendio y colofón del susodicho libro.
DOBLE PASIÓN
Mi palabra y mi boca dos mitades,
una le reza a Dios, otra te besa,
un solo corazón así confiesa
la adoración que tiene a dos deidades.
Lo místico a mi ser da claridades,
tu cuerpo terrenal mi amor apresa,
y la existencia vivo y nunca cesa
pasión que es doble y sin ambigüedades.
Si mi diosa es mortal y él es divino,
por amante que soy, por ser humano,
a ella entrego mi vida y a él la muerte.
Y si mi cuerpo al fin yo lo reclino,
pues él me lleva al cielo de su mano,
feliz seré, mi Dios, de conocerte.
CARABELAS CON DOS PROAS, (crónica sentimental de la conquista)
En 2018, la editorial malagüeña Corona del Sur me publica un nuevo poemario titulado Carabela con dos proas, cuyo
El libro CARABELAS CON DOS PROAS, (Crónica sentimental de la conquista) que también lleva un doble subtítulo de –Y sus hazañas no tendrán gusanos-. Trata en diferentes poemas de los amores de los conquistadores extremeños, primero a las extremeñas que dejan atrás, y de esos mismos conquistadores a las mujeres aztecas, mayas e incas, tratando su segunda parte de algunos hechos biográficamente notables de dichos conquistadores extremeños. Por lo tanto no trata el libro ni de la leyenda negra, ni rosa, ni gris ceniza, sino y me repito, de los sentimientos amorosos de nuestros conquistadores.subtítulo informa sobre su contenido: «Crónica sentimental de la conquista» y, en concreto, sabemos que es de América por las imágenes de conquistadores, carabelas y naturaleza tropical que ilustran la portada.
El libro que se acabó de imprimir el 28 de febrero de 2.018, consta de 48 páginas divididas en dos partes, y fue presentado al público en la Real Sociedad Económica Extremeña de Amigos del País, recitado e interpretado por Milagrosa Ortega que encarnó la voces de las extremeñas, aztecas, mayas e incas, y por mí mismo que encarné las voces de los conquistadores. El diseño de la cubierta también es creación mía.
El prólogo es de Cecilio Venegas Fito, Presidente del Colegio de Farmacéuticos de la provincia de Badajoz. Transcribo ahora unos fragmentos:
“Pues bien, el libro que hoy nos trae, apunta bien arriba. Desde la despedida de una tierra sin mar se verbaliza la figura del extremeño vestido de conquista, donde dos rumbos impelen el casco de la nave: Extremadura y América, nuevamente en el corazón de las personas. El amado y la amada nuevamente de frente, ya que según puede documentarse Extremadura lideró la presencia española en el primer empujón de la conquista.
Continuar reivindicando la presencia extremeña en América debía de ser de obligado tránsito por cuantos escriben en nuestra región, deber que con gran suficiencia cumple ahora Sito Lerate.
En el volumen se encuentra la importante figura de un barco con dos proas, figura paradójica que en sí misma ya constituye un hallazgo poético.
Esperamos ahora, en esta punta que la interesante y emotiva, perfecta obra de José Manuel Sito aún inédita siga aflorando. Ahí lo esperamos y nos esperamos todos, cuantos lo frecuentamos en todos los momentos donde nos acompaña.
A continuación podrás leer un poema del libro.
POR REMENBRANZA DE NACENCIA
(Pedro de Valdivia añorando su tierra natal,
funda Santiago de la Nueva Extremadura)
Por recuerdos de un sol y de una luna,
-transparencia de luz, lilial nevada-,
retorna en su pensar a propia cuna.
Cierra los ojos y vuelve a lo oriundo,
a la nacencia, y vuelve a la memoria
su viejo pueblo que es del viejo mundo.
Por nostalgias del río y de su cielo,
-nube en forma de pez y pez de nube-,
retorna a tal pensar como consuelo.
Por añoranza cuenta las estrellas
pues todas las contó cuando zarpara,
y ahora al contarlas faltan las más bellas.
Y en pregunta por pensativa muda
se interroga, y es su interrogación
pregunta en que va implícita la duda.
¿Cómo ubicar de un salto, si no hay alas,
del ibérico mapa mi lugar,
y tal cómo es sin reducción a escala,
sobre Chile y la geografía chilena?,
¡ay! si levantan piel, la de mi tierra,
desbordarán sus ríos que son venas.
Ante tal sentimiento y tal dilema
hizo el conquistador… (y bien hiciera)
y lo que éste hizo nos cuenta ahora el poema.
Que Pedro de Valdivia, ¡ay, por ternura!,
funda en Chile en recuerdo de su origen,
Santiago de la Nueva Extremadura.
LA ARITMÉTICA DEL SONIDO ES LA GRAMÁTICA DEL SILENCIO
El libro , se acabó de imprimir el 30 de Enero de 2018 en la editorial CORONA DEL SUR, consta de 76 páginas, son poemas de diferentes temáticas, entre los que destacan : YZX, SIN MOTIVO, o SIN PALABRAS, o A LA MANO CON LA CUAL ESCRIBO. El diseño de la cubierta también es de mi autoría, el prólogo es de la escritora MILA ORTEGA, y ha sido leído en la tertulia PÁGINA 72.
A continuación podrás leer unos fragmentos del prólogo:
“En su poesía cabe lo social, el compromiso y la identificación con la tragedia ajena. Nunca se olvida de los desheredados, los abandonados, los solos, enfermos, desorientados, es tan heterodoxo que puede desconcertar por momentos para atraerte, después, con la autenticidad y la entrega del yo poético, donde respira, sin duda, el más profundo José Manuel.
Descarnada su lengua para mostrar la verdad y de cristal si es preciso, para quebrarse de emoción.
Me gustaría acabar aludiendo a LISTA DE LECTORES INVITADOS, donde el autor nos invita a leerle, como yo les invito a leerlo, porque como el mismo dice de sus libros salen pájaros, que segura estoy, les llevarán a un mundo poético muy diferente a todo lo que puedan imaginar.
SIN PALABRAS
A orillas del río
cuando sin palabras,
-ni las voces remos
ni las lenguas barcas-,
supe por sus ojos
que algo nos pasaba,
callen nuestras voces,
que no digan nada,
que se trague lengua
su saliva blanca,
que el vaho del aliento
no empañe mis gafas,
que se explique todo
con vernos las caras,
porque un gesto dice
más que dos gargantas.
Con tan sólo un gesto
ella dijo “-¡Basta!,
basta de querernos
como dos guitarras
sin afinación,
cual huecas maracas,
como dos arpistas
sin cuerda en las arpas”.
Yo dije lo mismo
con mi voz callada,
pero añadí luego,
-siempre sin palabras-,
cosiendo mis labios
con un par de grapas
esto que ahora sigue,
-“Como dos fantasmas
hace que ululamos
más de una semana”.
Si ella en pie se puso
conté sus pisadas,
dos, tres, cuatro, cinco,
y aunque no le vi alas
se marchó volando
de vuelta a su rama,
yo le grité –“¡Espera!”,
-siempre sin palabras-,
y aunque me escuchó
fue en vano llamarla.
Y se acabó todo
sin mediar palabras,
sin decir amén,
sin decir caramba,
ni esta boca es mía,
ni este acento falta,
ni este punto sobra,
ni esta coma aclara.
Pues me quedé solo
oyendo a las ranas,
luego poco a poco
y más vela que ancla,
regresé a mi nido,
-siempre sin palabras-.
POEMAS CONTRA PISTOLAS
El libro se publicó por la editorial CORONA DEL SUR, el 18 de octubre de 2.018, consta de 53 páginas, y fue escrito en solidaridad con las víctimas del terrorismo, trata de poner en su sitio a los terroristas de ETA, con la dureza que se merecen los crímenes de los terroristas. Se publicó después de acabar la violencia etarra, esperando que no sólo supuestamente sea el final del terror, sino que lo sea ya de forma definitiva, y lo empecé a escribir tras el secuestro y asesinato de Miguel Ángel Blanco, es decir cuando la gota colmó el vaso, aunque el vaso se colmó incluso mucho antes.
El diseño de la cubierta sobre blanco, (manos blancas que fuimos y que somos) es también de mi autoría: una paloma con las alas partidas, y las tres letras de la palabra PAZ separadas, como un puzle a reconstruir.
Fue presentado el día 23 de abril de 2.019 en la Real Sociedad Económica Extremeña de Amigos del País, dirigida la puesta en escena por mí mismo, ayudado recitando por otra voz más, la de Fernando Garduño. Abrió el acto el periodista Luis Ángel Ruiz de Copegui Santoyo, leyendo el prólogo de su autoría (la presentación del libro en la R. S. E. de Amigos del País se puede ver en video en youtube) A continuación podrás leer el primer poema del libro.
SIN ESCOLTA
Que ya seas popular o socialista,
seas diputado o simple concejal,
ya seas conservador o progresista,
para tu biografía hay ya un final.
Y es que alguien quiere poner broche de oro
a tu valor, pues de escoltas careces,
que alguien dice – “Una bala es un tesoro,
y dos balazos de oro te mereces”.
Y añade –“Voy tu vida a silenciar,
pues pienso que estarás mejor callado,
y que estarás más guapo sin hablar,
porque de tanto hablar te has despeinado”.
Quien te va a liquidar sin tu permiso,
con su pistola apunta hacia tu sien,
porque te va a matar sin previo aviso,
con balas que no son de todo a cien.
Del que te va a matar se ignora el nombre,
ni aún tiene un alias, tiene un escondite,
el que te va a matar se siente muy hombre,
-“¡Qué hombre ahora soy!”, el tipo se repite.
-“Por decir libertad ahí va esta bala,
por sentirte español yo te remato,
porque mato a un demócrata, bengala,
y porque tengo un móvil te retrato,
te retrato ya muerto, eres trofeo,
del que se habrá de hablar mucho en euskera,
ya ves, callado no te encuentro feo,
¡qué fácil fue matar por vez primera!”.
Y que no será la última asegura,
pues tras esta primera otras promete,
le quedan siete más porque ahora jura,
que siempre le gustó el número siete.
Y es que seas popular o socialista,
seas diputado o simple concejal,
que seas conservador o progresista,
para tu biografía hay ya un final.
MIEDO ESCÉNICO
La obra de teatro MIEDO ESCÉNICO es la primera que he publicado de las catorce que tengo mprimir el 13 de diciembre de 2.018 en la editorial CORONA DEL SUR. Debajo del título lleva un segundo título, que dice así: (Y en donde también se desvela la novísima leyenda del verdadero rostro de Abd-Al Rahmman Ibn Marwán)
Trata la obra como el nombre indica del miedo escénico de una incipiente actriz, y trata además paralelamente del rostro probable, o ya definitivo rostro del fundador o refundador de Badajoz. La acción se desarrolla en Badajoz: Plaza Alta, escenario del teatro López de Ayala, y en el salón-comedor del Hotel Zurbarán.
El prólogo es de la escritora María Blázquez, a continuación unas líneas del mismo:
“La ciudad de Badajoz es el escenario donde se desarrolla la acción, con constantes menciones a lugares emblemáticos. A su vez el título no podía ser más acertado, ya que se acopla perfectamente a la historia y su desarrollo, nadie mejor que el autor, como actor que es, para hablar de ese miedo escénico, que, quizás, en alguna ocasión, haya podido conocer en sus propias carnes.
En MIEDO ESCÉNICO se aprecia la vocación del autor para sacar una sonrisa a sus lectores, pero también por provocar en ellos la emoción que todos escondemos en nuestros corazones al evocar nuestras raíces, por donde paseamos nuestras primeras miradas sorprendidas, donde recibimos el inicial átomo de oxígeno en nuestros pulmones y que, aunque como afirma José Manuel <siempre estamos partiendo como viajeros>, siempre guardaremos en un lugar privilegiado de nuestras esencia”.
La obra acaba con unos versos que recita uno de los personajes:
Ya en la escuela me sentí atraído por narraciones cortas como las leyendas de Bécquer, las novelas de Julio Verne o las fábulas de Iriarte y Samaniego. También me gustaron los romances anónimos y poemas de Rosalía de Castro o Rubén Darío. Y, además, me interesaron los entremeses y sainetes de la Galería Teatral Salesiana, en uno de los cuales intervine como actor y otros vi representar. En mi adolescencia, compuse unos poemas amorosos y algunos versos críticos contra aquel sistema cruel de enseñanza, cuyo lema era La letra con sangre entra.
Mi interés por la Literatura y, en especial, por la Poesía aumentó cuando me decidí a estudiar Filología Hispánica en Cáceres y conocí textos de la literatura española que me conmocionaron como, por ejemplo, las jarchas o las cantigas donde una joven enamorada se lamenta de la ausencia de su amado o las coplas de Jorge Manrique o poemas de Garcilaso de la Vega, Góngora, León Felipe, Lorca, Miguel Hernández, José Hierro, Ana Rossetti, Luis Antonio de Villena, Neruda, Walt Whitman, Tagore.
En 1979 inicio mi vida profesional como profesor de Lengua y Literatura en el nivel de la Enseñanza Media en varios colegios e institutos y, posteriormente, en la universidad de Extremadura. En 1983, comienzo a realizar actividades literarias para motivar a mis alumnos y edito las revistas El Tomillar (Badajoz), Ardila (Jerez de los Caballeros), ¡Conócenos! (Almendralejo), Loca Academia, Minerva, Arco Iris (Mérida) y Camino hacia Itaca del Centro de Profesores (Mérida) con apartados literarios. Además empiezo a editar poemarios de profesores, alumnos y personas del entorno: Por el mismo camino (1984), Dosis de Naturaleza (1985), Juntos en la palabra (1986), Lluvia de sentimientos (1987) y los libros citados en la introducción de Poesía de Fin de Siglo de esta web. Creo la Colección Emerita de Poesía de Gallos quiebran albores y coordino la edición de varias antologías (Gallos quiebran albores, Inagotable telar de eterna sinfonía, Palabra y música para un mundo nuevo y Cometas de luna blanca). Y publico Itinerario poético de Mérida e Itinerario Monumental de Mérida, rutas literarias (la primera dirigida a escolares y la segunda a viajeros) para conocer la antigua Augusta Emerita de un modo trascendente. Mientras, en estas publicaciones (y en otras) edito, además de artículos, comentarios y trabajos de investigación, poemas propios. Así, ambientado en esta dinámica actividad, mi experiencia docente se ha alargado hasta enero de 2016 después de 36 años y dos meses.
Mi atracción por la literatura de Extremadura surgió cuando comencé mis estudios de doctorado y decidí centrarme en la investigación de la literatura de mi entorno más próximo.
Ese interés dio lugar a varios trabajos de investigación: La poesía de Jesús Delgado Valhondo (1999). Gévora (Badajoz, 1952-1961). Estudio de una revista poética de Extremadura (2001). Poesía completa de Jesús Delgado Valhondo (2003). Itinerario poético de Mérida (2007). Jesús Delgado Valhondo: Vida. Poética. Poesía (2009). Catálogo de artículos y cartas de Jesús Delgado Valhondo (2009). Itinerario monumental de Mérida (2010), Panorámica poética de Extremadura (2012), Mérida abarcable (1950-1960) (2018), Mérida laboriosa I (1960-1970) (2020) y Mérida laboriosa II (1960-1970) (2022). Los tres últimos son libros de recuerdos sobre las décadas del pasado siglo, en que Mérida deja de ser «un pueblo grande», para convertirse en capital de Extremadura (el apartado más extenso de estos libros se titula «La poesía emeritense»).
Aparte tengo editados más de doscientos artículos, ensayos, comentarios, ponencias, reseñas y comunicaciones (“¡Que la tierra te sea ligera!”, «Actividad cultural en Extremadura a mediados del siglo XX». «Gallos quiebran albores: veinte años de poesía en Mérida» «Poetas portugueses en la revista Gévora de Badajoz», «Noticias sobre actividades literarias inéditas»).
Toda mi vida profesional y de investigación literaria se encuentra recogida en mi web personal Para que no se olvide el olvido.
POÉTICA
En cuanto a la Poesía, pienso que Poesía es comunicación, porque todos deseamos que nuestra palabra poética tenga la mayor difusión posible. Poesía es comunión, porque el poeta quiere que su palabra llegue al receptor y, además, éste comparta lo que dice. Poesía es indagación, porque es el resultado de una reflexión que ahonda en los temas tratados para desentrañar su sentido. Poesía es experiencia, pues ningún poeta puede olvidar sus vivencias y, aunque sea inconscientemente, se ve influido por ellas en mayor o menor medida … Y Poesía, en definitiva, es reflejo de la complejidad humana porque, a través de ella, el poeta expresa sus más profundos sentires, traumas, ilusiones, pesares, alegrías y anhelos.
La característica de mi poesía es la sencillez elaborada tanto desde el punto de vista formal como de contenido; siempre trato de transmitir mis sentimientos de una forma directa, natural y sintetizada, utilizando los artificios estrictamente necesarios. Soy un vate inconstante, pues sólo escribo cuando me lo pide mi mente y suele hacerlo muy de tarde en tarde. Así he pasado años sin escribir un verso; últimamente, me ha animado a componer varios poemas. No obstante, como uno es ya mayor, tengo escritos tres poemarios:
Versos de amor y vida (1979-1989)
(Mérida, Boysu, 1989).
A mediados de los 70, siento la necesidad de tener una pareja estable, la busco, tengo la suerte de encontrarla en 1976 y ambos decidimos compartir nuestra vida futura. En 1979, termino mis estudios universitarios, comienzo a impartir clases de Lengua y Literatura y contraigo matrimonio con mi pareja en 1981. Sin embargo nueve meses antes y un año después ocurren los sucesos más tristes de mi existencia en aquella época, cuando empezaba mi vida independiente: la temprana muerte de mi padre a los 53 años y la lógica por edad de mi abuela Valentina. Pero, posteriormente, el destino nos es favorable y tenemos en 1983 y 1987, a nuestros dos hijos, que llenan de ilusión y de felicidad nuestra casa. No obstante, la vida prosaica, las oposiciones, el trabajo, la situación inestable del país y la violencia en el mundo me provocan contratiempos y disgustos, que me llevan a no poder disfrutar plenamente de la vida sencilla y plena que había creado junto a mi familia. Estas vivencias son el argumento de Versos de amor y vida.
No me enterréis en Madrid,
llevadme junto al Guadiana.
Yo sé
que los muertos,
en cualquier sitio descansan,
pero …
¡no me enterréis en Madrid,
llevadme junto al Guadiana!
2
A aquel lugar sereno,
donde el agua se remansa,
donde la hierba crece
sin abono ni tardanza,
donde los pájaros alegres
dulcemente cantan …
¡donde un día pasé feliz
junto a mi amada!
3
No me enterréis en Madrid
junto al humo de las fábricas,
ni al lado de este río
con agua contaminada,
ni junto a esta Casa de Campo
que no es campo ni nada …
¡no me dejéis solo
junto a esta muerte sin alma!
4
Seguro os hará bien
conocer aquellas tierras extrañas,
seguro comprenderéis …
¡estas palabras ansiadas!
(Madrid, septiembre 1979)
Un futuro de tres
Un año más, felices
a nuestra manera:
noches sin dormir, días
sin pintar ni leer
ni tener tranquilidad.
Es nuestra hija
que nos despierta, que nos molesta,
que nos agota,
pero … ¿existe otra felicidad?:
verla crecer poco a poco;
notar que habla más claro;
acariciar su pelo rubio;
besar su piel sonrosada;
recibir sus abrazos;
vivir que alguien más te quiere,
te recuerda, te da calor;
sentir sin pensarlo,
a nuestro lado, otro más;
mirar el futuro
y afrontarlo con optimismo,
porque te ilusiona pensar en un futuro de tres,
aunque haya pasado
un año más.
(Jerez de los Caballeros, 7-5-85)
No hay manera
Abuela, tu lugar sigue vacío.
Echamos escombros, ripios,
tierra, lava de un enorme volcán,
la grava de un largo río
y no lo llenamos.
Intentamos inundarlo
de entrañables recuerdos
y sigue, aquí, idéntico abismo.
Le pedimos a Dios
que nos devuelva tu presencia,
pero continúa el hueco intacto …
¡No hay manera de llenar,
abuela, tu inmensa falta!
(Badajoz, 8-12-87)
Poemas de la esperanza(1990-1999)
(asalgueroc.blogspot.com)
Después de esta etapa, digamos idílica, mis circunstancias, como las de otros seres humanos comunes, no son siempre positivas: los recuerdos, las vivencias frustrantes, las dificultades cotidianas… se entremezclan con otras alentadoras (realizo el doctorado, mis hijos crecen sanos y continúan siendo con su madre mi soporte vital; disfruto con mis amigos de la tertulia literaria Gallos quiebran albores; realizo experiencias literarias gratificantes con mis alumnos; dedico mi tiempo de ocio a la investigación literaria) que me hacen albergar la esperanza de una vida apacible, aunque dinámica y trascendente, y un mundo más habitable, más humano, aunque no fuera perfecto, pero sufro decepciones. Esta mezcolanza de sentimientos es el hilo argumental de Poemas de la esperanza.
Paso por donde nací
y pienso que, posiblemente,
esa persona mayor
conoció a mi padre
y jugó y se alegró con él
y tiene recuerdos de su vida
que me gustaría conocer
para rescatarlo
en mi sentimiento
que se muestra huérfano
de sus recuerdos, de su vida
que acabó demasiado pronto.
Y siempre que paso
tengo necesidad de bajarme
y preguntar
hasta que alguien,
que lo conoció
me hable de él,
largo y tendido,
y lo haga con cariño
recordando a mi padre,
y yo participe de sus vivencias juntos
y se me llene este vacío
que me inunda,
cuando me acuerdo
de su pasado y su ausencia.
Sí, cuando paso,
me entran muchas ganas
de bajarme, preguntar,
escuchar atento
y saciar mi sed de recuerdos.
(Mérida, 2-3-91)
Volaron muy lejos mis sueños
Se acabó el idilio:
se esfumaron los sentimientos,
quedó afónica la palabra
y el corazón hecho pedazos de frío hielo.
Se me agotó la fuente inagotable
de mi (en otro tiempo) robusta (ahora, frágil) esperanza
y volaron muy lejos mis sueños
y mis ánimos, ayer rebosantes de mañanas.
Quedaron en un puño mis dedos inapartables
y perdí aquella ilusión desmesurada
que, feliz y optimista, me hacía saltar,
día tras día, sin problemas, de mi cálida cama.
Ahora no quiero saber de proyectos ideales,
sólo deseo conocer realidades, porque no encuentro
nada que me aferre a nada,
aunque sea por un incontable momento.
(Mérida, 3-9-91)
Trémula y honda emoción
La mano me tiembla emocionada
cuando abro la puerta de mi casa.
Algo en mí me advierte
que, dentro, tres corazones
laten al compás del mío
en un cálido ambiente de amor,
de experiencias compartidas,
de anhelos por realizar juntos,
de un futuro que resulta imposible concebir
sin el concurso de cuatro conciencias unidas
en un fraternal y sentido abrazo.
Sí, no me importa decir en voz alta
que abro la puerta de mi casa
con una trémula y honda emoción,
aunque hoy día se me tache de humano.
(Mérida, 1-5-98)
www.lindomundo.com (2000-2021)
(asalgueroc.blogspot.com)
Actualmente me encuentro muy preocupado por los múltiples problemas que azotan el mundo (guerras por doquier, emigración de masas humanas huyendo de la violencia, narcotraficantes envenenando a media humanidad, corrupción de dirigentes políticos, interés exclusivo por tener y no por ser -intrascendencia-, desestructuración social …).
De ahí que, en el primer poema, llame la atención sobre el mundo artificial en que vivimos, donde se nos prometen (a cambio de dinero, claro) idilios y paraísos creados por la publicidad y el ansia de vender, sin advertir que eso nos aleja de las vivencias auténticas y de nosotros mismos. En el segundo poema, trate un grave problema social de la actualidad: las separaciones matrimoniales de una forma traumática, que causan en los niños un doloroso sufrimiento cuando más necesitan de una estabilidad emocional. Y, en el tercer poema, hable sobre la quimera de vivir sin vernos afectados por el tiempo, deseo que llevamos patéticamente al extremo de sobrevivir como vegetales o enganchados a máquinas, sin advertir que es mejor morir naturalmente, con dignidad.
para no dejarnos embaucar con ilusiones
que no existen tal como nos las venden
en el mundo que pisamos
cambiamos por capricho
un simple y efímero placer
por la amistad conseguida cuando niños
y volvemos la espalda
a quien nos ayudó cuando lo necesitamos
por un honor que nadie nos aplaudirá
porque entonces estaremos solos
y así por desidia nos alejamos
de nosotros en un viaje sin retorno
de nuestra conciencia
hacia regiones donde nunca
lograremos encontrarnos
ni jamás hallaremos
razón a nuestro desamparo
sin embargo aún podemos continuar
siendo fieles a nosotros mismos
aunque nuestro perfil no responda
al modelo impuesto
por quienes hace tiempo
renegaron de su condición íntima y solidaria
de seres humanos
(Mérida, 2-4-01)
el salón de su casa
se ha convertido
en su mente de niño
en el desencolado proyecto
de un amor destruido
su alma antes límpida
ahora la llenan
negros vertederos
horizontes funestos
retóricos interrogantes
los dos pilares de su vida
hasta ahora diáfana
han roto su vínculo
y él que no sabe por qué
ha pasado bruscamente
del limbo de la infancia
a la crudeza de la soledad
en su prematura adolescencia
(Mérida, 26-6-04)
un día tendrás que averiguar
hasta qué momento vives plenamente
hasta cuándo saboreas la manzana o el vino
sin preocupaciones dietéticas
reaccionas dulcemente ante un gesto amable
de una persona no robotizada
puedes satisfacer tus íntimos deseos
con la persona que amas
o continúas abrigando ilusiones
y emocionándote la pasión de realizarlas
pero ese día en que seas consciente
de que confundes hasta tu nombre
ese día deberás decidir
echando mano de tu amedrentada cobardía
que nunca has de llegar a la indigna situación
de aquella mujer de la leyenda
que inútilmente intentaba escapar de la muerte
(Mérida, 13-7-04)
EPÍLOGO
En la actualidad mantengo dos blogs: Uno titulado La Enseñanza es el contagio de una pasión. La Literatura no se enseña, se contagia (asalgueroc.blospot.com.es), donde publico comentarios de los libros que leo (desde julio de 2012 -fecha en que inicio el blog- hasta febrero de 2022, he editado 225 comentarios), más otros sobre mis libros y mis actividades literarias. El otro blog, comenzado por mí el 26 de octubre de 2016, se denomina La letra con placer se aprecia (danieldosdientecitos.blospot.com.es), en el que edito comentarios, reflexiones y actividades relacionadas con la Didáctica, la Enseñanza y la Educación.
Desde el 26 de enero de 2015, cuento con una web, en colaboración con Luis Martín Martín, titulada Extremadura, XXI siglos de Poesía (extremaduraxxisiglosdepoesia.educarex.es) que, basada en mi libro Panorámica poética de Extremadura y en el proyecto denominado Extremadura, un bello poema, con formato de vídeos realizados por mis alumnos de 3º y 4º de la ESO y los alumnos del Ciclo Formativo de TV del I.E.S. Emerita Augusta de Mérida del profesor Luis Martín, pretende completar y mantener al día la información de la poesía en nuestra región, desde que surge en el siglo I hasta las manifestaciones más recientes del siglo XXI, y difundir a poetas contemporáneos no representativos (por ahora), pero que son dignos de ser conocidos, en una sección denominada Otros poetas actuales, donde me encuentro incluido.
Antonio Salguero Carvajal
Fotografía cabecera: Detalle del teatro romano de Mérida
Nací en Badajoz, un mes de junio del año 55. A la edad de nueve años inicié mi contacto con la poesía. Mi madrina, poseedora de una gran biblioteca, me invitaba a leerle poemas de Chamizo y Gabriel y Galán, alegando su imposibilidad por su edad y sus problemas de visión. Y así comenzó mi vocación por esos “renglones cortos”, como diría mi amigo y admirado Julio Cienfuegos, leyendo en castúo y adentrándome en un mundo que, posteriormente, se convertiría en una razón de vivir y en una actitud ante la vida.
Estudié Magisterio y, en ese tiempo, ya pude ver publicados mis poemas en Alminar y Seis y Siete, suplementos ambos del periódico Hoy donde, años después, continué colaborando como articulista.
Para mí, el ejercicio de la escritura poética, es un reto constante. Trato de encontrar mi propio espacio, alejado de modas, modismos y tendencias, pero respetando aquello que es consustancial al verso (ritmo, simbología, etc).
En cuanto a la temática, la caducidad, la fugacidad del tiempo, el sentido de la existencia (con todos sus interrogantes), la búsqueda de aquello que dé sentido a nuestra vida, caracterizan mi poética actualmente.
Y ese territorio personal donde pretendo ubicarme, no está cerrado a las lecturas de poetas que tanto me han enriquecido, aunque yo siempre defiendo que no tengo poetas, tengo poemas que me han marcado y permanecerán en mi memoria siempre.
Encontrar los recovecos, el lado oculto de la palabra y extraer de ella todas las posibilidades que me permitan expresar lo inexpresable, es un desafío. Ante él, el sentimiento impera. Conseguir que la palabra dé cabida al mismo, me exige mucha dedicación. Aún no lo he conseguido.
ETAPAS DE MI TRAYECTORIA POÉTICA
La primera, materializada en los poemarios Bajo la piel del agua y Horas caídas. Poesía amatoria, con un acentuado intimismo, donde hablo en primera persona.
La segunda, donde ya existe un cambio de temática. Voy saliendo de mí y concedo relevancia a otras personas. El amante pierde protagonismo.
Actualmente me encuentro en un proceso de búsqueda. Creo personajes ajenos a mí (Sigdhá, El hombre solo, Poemas de la huida), inéditos aún, que alternan con una poesía de la experiencia muy personal, donde me encuentro más a gusto.
Importante reseñar que el paso de un lirismo, característico en mí, a un pragmatismo actual, ha sido evidente. Modificación en rimas, métrica, ritmo, etc.
Finalmente, soy defensora del poemario donde exista un hilo conductor, una estructura, una historia donde cada poema ha de ocupar su lugar y no otro. Agrupar un montón de poemas inconexos que conformen un libro, no me ha convencido nunca. Continúo siendo fiel a este principio.
POEMARIOS
MAR DE FONDOS
Es una colección de poemas de variada temática, teniendo como hilo conductor el mar. Guarda el encanto, la ilusión y la ingenuidad del primer libro de poemas.
MAR DE HUIDAS
El mar tiene comienzos
donde la arena oculta su palidez huidiza
y se abre en lontananza
transparente.
El mar tiene principios
con música de címbalos y un canto de violines
que anuncian la mañana.
Su danza inacabada se pierde al horizonte
para buscar la luz
y un minuto de cielo entre sus aguas.
A lo lejos,
se oye un rumor de fondos
anunciando el poniente plomizo de la tarde.
El mar tiene comienzos.
No se vislumbra el fin desde la orilla…
BAJO LA PIEL DEL AGUA
Es un canto al amor. Este se materializa a lo largo del poemario. Consta de tres partes: pérdida, búsqueda y encuentro de dicho amor, pero un encuentro fugaz, efímero, porque nada perdura en nuestra existencia.
Tengo el amor callando.
Tanto andar los caminos con las alas tendidas,
tanta luz, tanto buscar los huecos del abrazo,
tantas noches vacías de tantas despedidas,
tanto avanzar hacia el adiós más próximo
que tanto amor
quiso vivir callando.
Habitó como náufrago su isla de silencios
y perdura en la sombra,
bajo la piel del agua.
Callado amor:
Mi cuerpo es una barca que resiste
los caprichos del agua.
Desnudo va mi corazón arriba,
desnuda va mi carne. Y este fiero deseo
que golpea tu puerta,
y te busca las manos,
y te lame los ojos,
y te adentra en la alcoba de los sueños perdidos
para que nunca mueras, amor,
para que nunca mueras.
LA VOZ OSCURA
Es un canto a la inspiración poética. Esa voz que, en mi caso, escucho -o me esfuerzo en escuchar- cada tarde. Esa voz que permanecerá aunque yo me haya ido.
Duermen los versos en el cajón vacío.
De ayer,
la vida que fecundó el poema,
vuelve sus páginas:
palabras sobre papel mojado,
letras cantadas por el aire más alto,
versos tan solo.
Amarillece el surco de la mano
y la luz de los ojos.
Solo el polvo acaricia las cadencias
del poema olvidado […].
Pero me iré algún día despacio, sin tropiezos,
y quedarán las cosas que tanto amé y perdí.
La voz, oscura y libre, habitará otra tarde
y en las baldas del tiempo pervivirá mi canto.
La voz oscura tiene el formato de plaquetes.
SALVA LA NOCHE
Da titulo a un único poema publicado en el boletín de la RAEX. Nació como respuesta a la pregunta de una niña, mi sobrina, ¿qué es vivir?
Preguntas qué es vivir…
Y en tu púber mejilla
aún se respira el hálito de la madre
acunando
los primeros sollozos,
las primeras sonrisas.
En ti, niña, la vida
alborece sin miedos modelando tersuras,
esculpiendo las formas de la tierra y el agua,
sembradora de espigas.
[…]
Aprende del camino la estrella que te guía,
porque la noche salva
como fanal que orienta tu navío
y esquife que te lleva a puertos de esperanza.
Aprende que la vida
es el rastro que dejas,
la piedra que esquivas en medio del camino,
el paraíso a veces,
el lodazal que anega.
Mira atrás
con la memoria justa que impone el sentimiento.
Nunca digas adiós
si no desangras otro adiós en tu pecho,
entonces,
no demores la hora de partida,
avanza hacia tus nortes y olvida
si es preciso.
[…]
Róbale al tiempo
un momento de árbol, de sombras, de paisajes,
de luz, de atardeceres,
de músicas y ríos.
Pon alas al instante
y vuela tus presentes como pájaro eterno.
Ámate a ti misma.
Que el universo pueda sembrarse en tus llanuras.
Ama siempre y camina
desde tu amor
al mundo.
HORAS CAÍDAS
Se adentra en la fugacidad del tiempo, de la existencia. Primavera, verano y otoño se corresponden con el inicio, la madurez y el declive del amor, pero siempre nos asiste la esperanza. Culminará el invierno en otra nueva primavera, en un nuevo comienzo, en una nueva razón de existir a la que nos podamos aferrar.
Ser tiempo…
Oír las hojas muertas del otoño
caer sobre el asfalto. Sentir la lluvia
golpear sobre piedra, arañar el silencio
que la tarde va tejiendo despacio.
Ser tiempo…
Y ahuecar estas manos repletas de vacíos.
Estas manos
que palparon el tedio de las horas caídas,
que anidaron palomas
y aventaron el vuelo del olvido,
que aprendieron a deshojar otoños.
Ser tiempo…
Y pasar sobre las hojas secas.
Existir
como árbol que entrega su raíz a la tierra,
como árbol impuro, mancillado de vientos,
como árbol que aguarda estaciones azules
y habita la soledad callada y convivida.
Existir
como árbol que medra.
Ser tiempo…
Y sabernos desnudos
en esa hora gris de la mirada.
Descarnados de luz, desnudos,
errantes entre las sombras
hacia la noche cierta.
A ORILLAS DE OTRA LUZ
Es una autobiografía dedicada a mi madre. Pinceladas de mi niñez y adolescencia y, sobre todo, la pervivencia de esa niña que fui. Ella sigue existiendo dentro de mí. Si todos conserváramos ese niño, la capacidad de asombro, el mundo, posiblemente, sería mejor, más auténtico.
Entre visillos blancos
la ciudad despertaba con un canto de pájaros.
Rayos de luz vencían a toda oscuridad.
Aquella luz temprana pincelaba
mis primeros paisajes: un parque con columpios
y árboles gigantes, morada de los duendes.
Mi reino,
bajo un cielo compartido
en tardes de merienda
y mañanas de fiesta.
Entre visillos
la alcoba era un cofre de sorpresas.
El hada madrugaba cada día
para jugar conmigo al escondite.
La magia de ser niña,
como un secreto a voces se ocultaba
detrás de los cristales,
entre visillos blancos
y ventanas al mundo.
[…]
La niña en mí fue niña… hoy no quiere crecer.
Ha conocido tanto, tanto aprendió la niña
de esa historia incompleta que es la vida, que así,
las páginas en blanco pasaron sin memoria
para que plumas nunca puedan verter su tinta
y profanar la albura de un tiempo no vivido,
tal vez imaginado, inventado a capricho.
Niña de mí, tan mía, hoy no quieres crecer,
quieres seguir creyendo en un mundo distinto,
sin miedos, sin miserias, sin dolor y sin muerte.
Un mundo donde el hombre lleve ese niño siempre
de la mano del alma, para que nunca muera.
Hoy no quiere crecer, has conocido tanto
que tu piel borda surcos y hay resaca en tu aliento.
Por tu espalda resbalan las nieves y la escarcha
de inviernos inclementes. Pero sigues en mí,
nunca te fuiste, y quiero fundirme en tu pureza
como ayer, como siempre, que aprendamos a un tiempo
y escribamos las páginas de la vida que resta.
Caminemos despacio a un mundo donde haya
lugar para el asombro, y que su luz nos guíe.
Nota.-Trinidad Ródenas Alcón es creadora y autora de un blog titulado «El canto del sonámbulo».
Nací en Almendralejo en los años cincuenta. Mis primeros años de estudios en el IES Santiago Apóstol fueron decisivos en mi inquietud literaria. Miguel Hernández, Lorca fueron mis preferidos. Después llegaron las extensas lecturas de Juan Ramón Jiménez y Machado. De la poesía pasé al teatro, tiempos en lo que lo prohibido se hacía atractivo y acabé en un grupo de arte y ensayo interpretando obras de autores centroeuropeos. Con dieciocho años me vine a estudiar humanidades a Badajoz. Ordenándome sacerdote a los veinticuatro años. Al poco tiempo, con veinticinco años, atravesé los Pirineos para ir a estudiar en Bélgica, en la Universidad Católica de Lovaina (Louvain-la –Neuve), Antropología y Teología.
Mi encuentro con el sociólogo y antropólogo René Houtard en Louvain marcó un antes y un después en mi visión de la realidad. En el entorno de este profesor, catedrático de sociología, tomé contacto con grupos próximos a la teología de la Liberación y con escritores libaneses y palestinos. En esta época formé parte de un grupo cercano a la escritora y profesora de la KUL (Katholieke Universiteit Leuven), Kristien Hemmerechts. A través de estos escritores de Leuven tomé contacto con algunos poetas francófonos, como André Schmitz, Guy Cabet (poeta y músico), André Imberechts (W.Cliff).
Al volver a Badajoz, a finales de los ochenta, alterné mi actividad docente universitaria con una intensa actividad social en el mundo gitano y desestructurado de la Plaza Alta de Badajoz. Este entorno, deprimido socialmente, me sirvió para escribir de forma menos lírica y con un contenido más social. Artículos reivindicativos sobre esta zona deprimida de Badajoz fueron apareciendo en el diario Hoy. Por otro lado, la concesión del premio Internacional de poesía Amico Rom de Lanchano (Italia) marcó otra manera de trabajar el verso. Esta no sería la única. Después vendrían otras formas de entender la poesía.
En el año 2000 dejé la institución eclesial para dedicarme al completo a la docencia no universitaria impartiendo clases de filosofía en Secundaria y Bachillerato hasta el año 2017. Son en estos momentos de inicios del siglo XXI cuando empecé a publicar. Y fue en estos momentos cuando conocí al escritor Francisco Rangel, perteneciente a la Asociación de Gallos Quiebran Albores, el que me invitó a participar en la misma. El encuentro con este grupo de escritores de Mérida hizo que me planteara nuevas formas de crear el verso. En el año 2010, junto con otros escritores de la ciudad de Badajoz fundamos una tertulia que terminó por llamarse Tertulia de Escritores Página 72.
POÉTICA
Desde mi primera obra publicada en 1999, Poemas gitanos (Uziel. Premio Amico Rom) hasta el actual libro El nombre secreto del agua (Vitruvio 2017) mi forma de escribir ha sufrido una notable evolución. De un verso balbuceante de lo social, con notas líricas a uno más intimista y existencial donde la mezcla de prosa poética y poesía se ha convertido en una forma de trabajar. De manera transversal y continua la metapoesía ha ido apareciendo en mis escritos, como una forma de decir lo que hago y porqué lo hago. Hablar de la poesía haciendo versos serena mi inquietud de permanente búsqueda.
Podría decirse que en mi corta vida de escritor hay tres etapas:
La primera, (1998-2003) donde el verso tiene como referencia adulta la realidad social y, a veces, la sobrevivencia como meta-relato. De esta etapa son los poemarios: Poemas gitanos, Pegados al horizonte, Cuatro momentos para el poema y Quiebros del laberinto. Este último, en la línea de la poética del silencio, es un paso a otra forma diferente de encarar la palabra escrita.
En esta época, 2002, gané el primer premio con un poema «Tu gesto», en la Fiesta de la Primavera convocada por la R.S. Económica E. de Amigos del País en Badajoz.
La segunda etapa (2003-2010) viene marcada por un planteamiento de vida diferente. Por una parte, una visión de lo humano donde la fragilidad toma protagonismo. En esos momentos vivía con intensidad la enfermedad de Parkinson de mi padre. Y por otro lado, otra forma de encarar lo cotidiano como realidad mayor. En esta etapa salen a la luz varios libros: Las siete vidas del gato y Un concierto de sonidos diminutos.
A partir de esta segunda etapa comencé a aparecer en Antologías poéticas, no solo locales sino también nacionales. Otoño literario (Badajoz), Rizomas (Mérida), Poetas en Libertad 8 (Madrid).
Y la tercera etapa (2010-2017), tiene como referencia el ámbito creador de la Tertulia Página 72, y de manera especial el nacimiento de mi hijo Rodrigo. Así, en el ámbito del crecimiento poético y personal surge un poemario: El nombre secreto del agua. Con este libro descubro una forma de entender la realidad más intimista y donde la meta-poesía viene a ser el trabajo central.
Los próximos libros, abordan temáticas diferentes en consonancia con esta línea de la tercera etapa como son La sorpresa de lo humano, y Rehacer el alba. Memorias de un naufragio.
En esta etapa se sucedieron también la participación en Antologías: Selección de poemas 10 autores (Madrid); Veinte verdades fingidas (Badajoz); Silencios encontrados (Málaga); Itinerario Monumental de Mérida (Mérida); Al final poesía (Málaga); Como un río sonoro de manzanas (Mérida): Salgueiro Maia (Cáceres).
Si la primera etapa está marcada por lo social, y la segunda por la existencial, la tercera tiene una nota intimista donde el verso busca referencias meta-poéticas, como el agua o el tiempo. Este crecimiento de fondo no es más que el desvelamiento de ese espejo interior que, de forma sencilla, marca la mirada del silencio creador.
Todos los momentos han sido y lo siguen siendo un encuentro intenso con grandes creadores a través de la lectura diaria de sus obras. Entre otros cito a Cernuda, Valente, Otero, Gamoneda, García Montero, Andrade, Sophia de Mello, Peixoto, sin olvidar a los clásicos Garcilaso, Bécquer, Rimbaud. Dicho esto, confieso que soy un lector compulsivo de poesía.
COMPOSICIÓN POÉTICA. OBRAS PUBLICADAS
POEMAS GITANOS
(Premio Amico Rom Lanchano (Italia). Badajoz, Uziel, 1998)
Este poemario, primera de las obras que aparecen en público, obtuvo el premio especial del jurado y Diploma de honor a un poeta extranjero en el V Concurso artístico internacional “Amico rom” que la Associazione Culturale Thèm Romanó Onlus convoca cada año.
Los poemas fueron recogidos en un cuaderno editado por Uziel, Colección poética 1998. Nº 4. A esos poemas se le añadieron otros, resultando un total de13 poemas. Los poemas premiados tienen expresiones romanís como un guiño a la cultura gitana que por razones miles, muchas de ellas políticas, no se desarrolló en España.
La obra está dedicada a mis padres que me enseñaron a compartir con los demás sueños de mar, prendido a la línea de horizonte lejos de naufragios.
Se abre el libro con un primer poema a modo de canto, Gili romaní, seguido de otro de las mismas características, Taranto. El resto pone de relieve aquello que forma parte de ese ser gitano tan particular, como son la salvaguarda de la virginidad de la mujer antes de casarse, lo que se llama la honra de la mujer joven, Chaví; la actuación de la justicia entre los clanes manteniendo la figura de honor del anciano, El tío. Los demás poemas son letras para canciones dirigidas al sol y a la luna, Kham ta `Chon y tópicos del pueblo gitano, como el deseo de la buena suerte, Sastipé.
Escritos en primera o segunda persona los poemas trazan el sentimiento del pueblo gitano. Los versos mantienen las rimas asonantes y consonantes propias de los cantos a la guitarra. Mucho de ellos mantiene el ritmo de los poemas lorquianos.
Gili Romani
Gili romaní
grito gitano
de voz cortada
jonda
Gili romaní
nota blanca
en clave de sol
rumba
Gili romaní
calor de fragua
de cuerda
de guitarra.
Gili romaní
galán de noche
calor
de hombre.
Gili romaní
beso amante
que adormece
y sueña.
Gili romaní
canto y nota,
voz
y rosa.
Gili romaní
palma y danza
amor
y deseo.
El tío
Pañuelo al cuello,
bastón en mano,
mirada firme
flor de arrabal.
Silencio de palabras
sombrero calado
boca cerrada
sol de mediodía.
Juicio de hermanos
ley gitana
reyerta de agravios
sangre y vida.
Kham Ta ‘chon
Sol de la mañana.
Luz ronca.
Sudor de piel morena,
de espalada rota.
Luna que baña de plata,
canto de luz,
el transitar de la caravana.
La niña duerme.
Duerme la niña.
Sol,
Luna
voz, beso,
palabra, verbo
cuna, sueño.
Rueda la caravana, rueda.
Gitano,
con el sol a cuestas,
la luna en la frente.
Beso, gitano.
cuento, canto.
Gitano.
PEGADOS AL HORIZONTE
(Plaqueta desplegable. Editado por Uziel. Badajoz. 2000)
Poemario de amor y desamor, donde los versos vibran ante la ausencia hasta sumergirse en el gozo de la presencia.
Las ausencias la forman seis poemas (I-VI) conformando un capitulo llamado Cantos de sirena. En este espacio el yo lírico siente la pérdida de lo amado, y el querer se confunde con la pasión. El ambiente, lleno de sonidos inconexos, marca la pauta del deseo. Sólo el silencio será capaz de calmar la angustia de lo ausente, de lo que no es, de aquello de lo que no se quiere hacer historia ni pasado. El tiempo juego, en estos versos, un papel protagonista.
Esta idea del canto de las sirenas es una alegoría de lo terrible, de lo irremediable ante el engaño. Ya en el capítulo XII de la Odisea de Homero, el personaje Odiseo hace caso omiso de este canto engañoso de las figuras míticas. Al tomar esta figura literaria el capítulo del poemario pretende subrayar el hecho de la seducción y del engaño, ese que el propio yo sufre ante las ausencias. Lo ausente se idealiza y, aunque resulte paradójico, por el mismo motivo que este hecho engaña atrae.
Las presencias se dibujan con otros seis poemas (I-VI). Este apartado se titula Cantos de tierra adentro. Es el espacio donde el yo traza lo firme en paralelo con otra realidad fuera de su alcance. Ya no se juega con el deseo imaginado sino con la realidad y en presente. Es cierto que este capítulo tiene una traza similar a lo que se pudiera llamar el gozo místico del encuentro haciendo un guiño al Cantico espiritual de Juan de la Cruz. Ahora, no es la noche sino el amanecer el que dibuja la línea del encuentro. Otra vez el tiempo, ahora sin delimitar, el que conduce a la presencia, a la realidad aceptada volviéndolo todo gozoso.
Hay quien, después de leer estos dos capítulos que forman la plaqué, podría decir que el tema principal del poemario no va más allá de una situación romántica donde la protesta por lo que se va se acalla con la luz de lo que llega. Sin embargo, no es así. Los doce poemas cuentan la historia de las perdidas, pero de todas las pérdidas-no solo las amorosas- que, aceptadas, hacen crecer al ser humano. Trata, por un lado, de la lucha interna con los propios sentimientos, y del acrecimiento ante lo que llegal siendo esta realidad algo que el yo aprecia doblemente.
Se juega con la dicotomía amor-desamor, incluso con la paradoja de sufrir al mismo tiempo que se siente la alegría del no todo está perdido.
I
QUIERO distraer la atención, un río hecho de pasiones
ocultando el canto que me aprieta el sentir hasta herirme.
Quiero sofocar la palabra, ahora balbuceo
bajo el manto de la mañana despertada en la indiferencia.
Quiero no querer que el silencio me abandone dejando
de ti el recuero en medio de los ruidos,
que señalan donde estoy ahora sin norte, quito,
en la atonía de la horas.
Quiero derribar este muro de dolor y entregarme a la luz,
al sonido, a la visión de lo mejor, y crear fantasías,
irreales historias que me lleven hasta ti, sí.
Quiero dormir y levantarme mañana pensando
que todo ha sido un sueño, una pesadilla
y encontrarte ahí aguardado el saludo de la carne
fundida con el alma.
V
Te he encontrado
después de esperar
en el cansancio de los días.
Gozo de la brisa que baña mi orilla.
recogido en la calma de este río,
al unísono de este fuego
que prende en mí
sin quemarme.
Te encuentro así, sin titubeos,
llena de primaveras, de lunas.
Y navego en ti, hasta saciar mis labios
con versos. Sí, con palabras
de viento y mar
y sentirte ardiendo.
CUATRO MOMENTOS PARA EL POEMA
(Primer Premio de Poesía Villa de Montijo. Montijo, Ayuntamiento, 2001)
Según Antonio Viudas Camarasa, uno de los miembros del jurado, la obra muestra, en verso libre y armónico ritmo interno, momentos de la vida en la creación literaria. Viudas Camarasa opina que el autor presenta una poética especial y demuestra haber leído e interiorizado versos de la mejor poesía, mientras medita en la esencia de la vida. Creencia, ensueño, existencia, vivencia son ejes sobre los que se mueve su creación artística. Expresiones sencillas, de copiosa sensibilidad y reflexión sobre el ser humano, donde las palabras son “logos perfumado” y se mira la vida “con los ojos de lo amado”. Estas opiniones me llevan a escribir con más detenimiento, aunque la confianza en mi proceso de creación se dará a partir del 2010 cuando la Editorial Imcrea me publique Las siete vidas del gato.
Cuatro momentos para el poema hace referencia a cuatro tiempos del existir real, de la vida que cuesta mirar y que los versos son capaces de traducir con la fuerza y el calor de la palabra. Estos cuatro tiempos se enraízan en los elementos humanos que forman parte del paisaje humano: crecer, soñar, existir y vivir.
Los versos de esta obra están dedicados a Mauricio Jorquera “un hombre bueno que sabe estar al lado sobre todo cuando los momentos se hacen difíciles”.
El jurado, presidido por el concejal de Cultura, Gonzalo Vaca Alvarez, estuvo integrado por Teodoro Gracia Jiménez, Piedad González Castell, Rosa Lencero Cerezo, Antonio Viudas Camarasa y Francisco Lebrato Fuentes.
III
EXISTIR en el hastío de los días,
monocordes y grises, y en los alegres,
en todos los días de amor
que dan felicidad sin nombre,
que pasan y dejan su huella
en la brisa del recuerdo;
EXISTIR, con las manos tendidas,
abiertas en señal de duelo, de oración
por todos los muertos, por todas las injusticias
que rompen el horizonte humano,
por todos los sinsabores,
por todos los desprecios;
EXISTIR, con los pies en la tierra,
pegados a ella hasta enamorar los cielos,
prometidos paraísos de otro día
en discursos envueltos,
transformados hoy en deseos,
en sinceros ideales vestidos
aún de Invierno;
EXISTIR, con la rabia en la boca,
y los ojos ciegos al llorar en mi adentro;
con el infierno de la duda y en la sinrazón
quemando trozos de alma
y de sentido amor;
en el rechazo, con torpezas,
amordazado;
EXISTIR, con la vida en vigilia,
insomne, pendiente y a la espera;
viviendo en la crecida, en un permanente nacer
con el deseo de los hambrientos,
con la locura de confiar en blanco;
EXISTIR en el calor de los días,
con la casa en fiesta y el alma vestida
de todo lo humano, de dioses y Olimpos,
de cielos, de lo que comprendo, de todo lo vivo
y de lo contrario;
Existir con la esperanza dolorida
y un vivir de primavera,
renaciendo siempre
y amando …
TU GESTO
(Primer premio de la Fiesta de la Primavera. Badajoz, Revista Real Sociedad Económica Extremeña de Amigos de Badajoz, 2002)
I
TU MIRADA llegó
alada mariposa perfumando
la línea invisible
del pensamiento.
TODO estaba en orden , todo era perfecto,
faltabas tú, tu sombra
con la bondad
de tu huella a cada paso.
TU MANO pasó después
y se posó pétalo de flor, sobre
el cuidado cuerpo
de lo cotidiano;
TODO fue solemne y sencillo a la vez,
tan grande en lo pequeño
que necesario fue estar vigilante
para descubrir tu paso y tu mirada;
TU GESTO, tu mano y tu mirada
lluvia de mayo, llegaron,
empujando las horas, brisa cálida
vistiéndome de calma.
II
SIEMPRE llegas como aire
como luz que amanece en los labios,
en las secretas palabras sin madrugar
ABRANZANDO el espacio llegas,
huella amante, en las vencidas sombras,
en esos rincones todavía dormidos;
LLEGAS y siempre nacemos
a la fiesta del amor sin cortapisas
envueltos los dos en la mañana
que no quiere despertar
QUIEBROS DEL LABERINTO
(Badajoz, Nuevas Letras, 2003)
Con este poemario editado por Juan Antonio Méndez del Soto en la desaparecida editorial Nuevas Letras e ilustrado con las acuarelas de Leiva (ex-director de la Escuela de Arte de Mérida), consolido una manera de hacer aunque no es la forma definitiva. Los comentarios de Ramón Pérez Parejo a esta obra fueron extraordinarios hasta el punto de entusiasmarme en la Poética del silencio.
La obra está compuesta por 24 poemas escritos en verso blanco y en tercera persona. Marcando cada uno de los capítulos y en cursiva hay una relato, el de un peregrino en busca del centro de una ciudad laberíntica.
La prologuista de la obra, Rosa Rodiño, decía que “la obra nacía de un gran esfuerzo dilatado en el tiempo y por lo tanto hijo es de un parto bien sufrido…”. Rosa añadió que el poeta es “un caminante que observa y guarda en la memoria el bullicio, la risa de gentes en las calles”.
El poemario traza, a modo de relato y en versos blancos, las andanzas de un peregrino por una ciudad. Esta no es una realidad física sino espiritual. Este el meta-relato para hablar del alma que busca el centro de sí mismo del ser, la realidad innominada del misterio. La referencia inspiradora es la ciudad de Badajoz.
La estructura interna de la obra se enraíza en los cuatro elementos: agua, aire, fuego y tierra. Son estos elementos los que llevan al poeta a mirar con ojos de amante herido por los rincones de una ciudad donde-paradójicamente- vive y se siente morir. Es el lugar donde el ser, al mismo tiempo que se apaga, renace. En definitiva, el libro trata de los sentimientos encontrados en la aventura de la búsqueda interior, del fuego como de lo auténtico. Será esta búsqueda la que provoca esos quiebros, esos saltos propios de quien se resiste a la monotonía del siempre lo mismo.
Así, el relato nos adentra en el entresijo de calles, siendo la ciudad una gran metáfora para subrayar como el ser humano, en su búsqueda de la verdad se introduce en el laberinto de la existencia, un viaje interior lleno de sueños y de deseos. Dicho esto se comprende el porqué de la estética de los espacios en blanco en el poema, además de que esto permite al interlocutor una lectura pausada e interiorizar el sentido de los versos.
Es muy importante el simbolismo de la luz, porque este nos acerca a la visión mística del recorrido. En este singular viaje ayuda que el tratamiento del paisaje sea de tonos claros y sin estridencias así como la insistencia en lo desierto, despoblado y sin vida que le dan un tono social a la búsqueda.
El poemario, viene a ser también una protesta, una denuncia ante situaciones conflictivas vividas en este o parecido espacio. Por otro lado, es notorio el predominio de lo contemplativo en un ámbito donde el color predominante es el azul.
Hay que resaltar que a lo largo de todo el poemario existe una ausencia de la primera persona, un escamoteo del yo literario, siendo la tercera persona la que permite que el protagonismo lo tome lo observado.
Quiebros del laberinto tiene una indirecta intencionalidad y es la de ayudar a que cada uno encuentre esa ciudad interior que está por descubrir…
En la frontera del Sol la ciudad herida estaba
En mil pedazos rota.
El viajero se acercó…
A la Alcazaba
GUSANO de piedras que abraza
el pretil del horizonte,
orilla de otro mundo,
paisaje con sabor a cal,
a madrugadas,
lleno de amores y lunas.
ALCAZABA verdiblanca
bañada de claridad
de vientre arrugado y almohade
donde los días hablan de vientos
AMOR de mañanas que susurran
flores
amor de tardes llenan
los ojos de dulces secretos,
de calles
de cantos desvelados.
PREÑADA de fría soledad
mocea el deseo del aire
que revienta en la lluvia,
en el torpe bullicio del paisaje.
Un dialogo de cielos
acuna las estrellas
TRAICIONES y risas
ansiosas de descanso
se vierten en la sangre
y en el río.
HIPOTECADA
en el impuso del vacío
surca el misterio de los días
esa memoria ácida que la hunde
En la ciénaga del recuerdo.
VIGIA grávida de hombres
que se quiebra
en mil antojos
de atormentados sueños.
DESTRONADA en un paraíso
de abrazos
de ríos,
de lunas,
Juega con el afán mudo
de clarear mares.
VESTIDA con olor de humo y cartón
se agacha en la soberbia de la orilla
con la viuda embriagada
hasta el colmo del hastío.
LAS SIETE VIDAS DEL GATO
(Badajoz, Imcrea, 2010)
Comienza el libro con la dedicatoria: A mi padre, de quien aprendí a mirar la vida. Y es que este libro tiene como emoción y eje central los sentimientos hacia mi padre, los sentimientos por los que veo llegar lo inevitable a mi ser más querido. Estos sentimientos se reproducen en forma de verso al interpretar el viento, la luz, el agua que pudieran ser los últimos en cualquier instante.
En las cuatro partes de que consta el poemario, intento ir, casi en silencio, por el caudal de la vida, contemplando los accidentes del camino y el final del mismo. Todo ello reflejado en las circunstancias de la enfermedad de mi padre, el durísimo Párkinson, en la difícil espera de la muerte y en el impresionante intercambio de amor y energía entre mi padre y yo.
En esta obra intento transmitir el dolor con suavidad, eliminando la crudeza de esta situación difícil para dejar vía libre a esa mirada con la que mi padre me enseña a mirar la vida. En ningún momento dejo de preguntarme por el porqué de este terrible tránsito de la muerte, de analizar la ternura y el desconcierto que este hecho existencial me produce para aprender de cualquier respuesta por leve que sea. Hay preguntas que no tienen respuesta, aunque es cierto que una pregunta siempre es un paso hacia delante.
Un concierto de sonidos diminutos, es un poemario donde los ruidos de lo cotidiano y lo citadino se convierten en un concierto de diminutos gestos que se refleja en los versos como una paradoja de este vivir a contracorriente que termina por ser una ironía. En realidad, el poemario viene a ser un libreto para seguir una partitura en la que está escrita la vida misma.
El título, esos sonidos diminutos, nos van a dar la clave para asomarnos a los poemas: La clave es el silencio cómplice, porque en medio de ese silencio es donde anidan los secretos, sus momentos de salvación y esos resquicios de luz que encuentra el poeta en la vorágine de los relojes y los calendarios…Una búsqueda constante de levedad. Es un poemario muy terrestre, muy aterrizado, anclado a lo cotidiano a veces incluso de manera dolorosa, hundiendo sus raíces en el fango de cada jornada…
Un concierto de sonidos diminutos es también el retrato de una salvación, del hallazgo de destellos en medio de una oscura monotonía. La salida del laberinto de “pobreza y desastres” de los que habla la radio está dibujada sobre el mapa de la piel. El poemario se toca también, el papel se torna en materia viva, esconde pulsiones y en muchas de estas páginas tiembla el placer. Y otra vez el juego de contrarios, necesarios mutuamente y espejo de la vida: ruido y silencio, peso y levedad, y ahora materia y aire, o alma (presente en algunos poemas).
cuando la piel y el agua se confunden con el aire.
Siesta
El calor aprieta los tabiques. Una mosca
deja estelas en la luz. Y con el insecto,
la pasión se enreda en los muebles.
Un concierto de sonidos diminutos.
Las paredes dibujan sombras.
La calma pasea su reino
al compás de una persiana
que juega con la brisa al escondite.
El rugido loco de un motor
rasga la siesta en dos mitades.
Una maldición recorre la calle.
Un grito remata el concierto
del alboroto. se despeja la playa
de los sueños y el gigante de la tarde
se adueña de la situación.
Y otra vez a empezar.
Marginal
Es difícil vivir con los ojos cerrados,
pensar que apago la luz del corazón
mientras creo que duermes. Existes.
Me pregunto si alguna vez
dejé de amarte. hay tanta lluvia
en las ausencias, que el agua es incapaz
de llevarse tu cautela.
Por encima de la muerte
la vida toma nombre en la distancia.
Serena esperanza que un día
pareció ser libre en esta cárcel del tiempo.
Te llamo en el reverso de las horas.
Tu voz me devuelve a la calma,
despeja el pulso de la noche.
Paso la hoja. Dejo de escribir,
pero no de buscarte
entre los ángulos del silencio.
EL NOMBRE SECRETO DEL AGUA
(Madrid, Vitruvio, Col. Baños del Carmen, 2016)
El título se debe al último verso de la última estrofa del propio libro: Se oculta el poema en el aliento de las palabras. / Y las estrofas, cantos rodados, se pegan / al ser del verbo, con el anhelo / de darle nombre al agua.
El libro tiene tres partes con los títulos prestados del aserto de Heráclito: TODO FLUYE, TODO CAMBIA, NADA PERMANECE. A lo largo de cada una de estas partes discurren veintiocho poemas enumerados y otros tantos sin enumerar y en recto separado por barras cursivas. Estos últimos son como un eco en cada uno de los capítulos, véase por ejemplo las págs. 21,24,27,31,33,36,38,41,43,46, 53,55,57. Junto a estos, e intercalándose, hay una serie de prosas poéticas que pretenden, rompiendo la estética acostumbrada, pararse en una reflexión que al yo literario se le antoja necesaria, véase por ejemplo la pág. 17.
La estructura, en sí misma, es un ensayo estético que intenta completar, con miradas y formas diferentes, una reflexión de conjunto sobre la búsqueda de lo esencial en medio de lo frágil. El agua es el metarrelato; esta es la gran metáfora a través de la cual el yo literario se aventura en contar sensaciones que van alternando el dentro y el afuera en un juego místico que deja al lector su parte creadora.
Nunca, como ahora, sentí este dulce trueque del agua,
ebrio de tormentas, en el oscuro espejo de los juncos.
Nunca sentí el vértigo de las miradas que me afirman
y nombran en el caudal de otras orillas.
Nunca tuve tan cerca los muros de esta casa
de mi cuerpo, la caricia del viento resbalando
por la frontera de mi espalda. Nunca, como ahora,
me fue tan tierna el agua.
Nunca sentí mi piel tan llena de remansos
en la búsqueda de un punto en el horizonte.
Nunca, como ahora, noté tan cálida esta magia
de los dedos que fluye, mansamente, en la corriente
de las horas.
Nunca.
28
Sigo mudo en esta fragilidad
del misterio que me circunda. Los verbos
resisten entre aguas interiores. Ruedan
ebrios de limo.
Quiero regresar al lugar del sueño,
sin alas. Impulso que busca,
en el espejo del agua,
versos prohibidos.
Se oculta el poema en el aliento de las palabras.
Y las estrofas, cantos rodados, se pegan
al ser del verbo, con el anhelo
de darle nombre al agua.
REHACER EL ALBA. MEMORIAS DE UN NAUFRAGIO
(Madrid, Vitruvio, 2018)
A comienzos de 2018, publico en la editorial Vitruvio Rehacer el alba. Memorias de un naufragio, que lleva este texto en la contraportada: «ES POSIBLE la luz cuando la paciencia de la noche rehace el alba. Es posible la claridad a pesar de sentir el peso de la propia historia, esa levedad de la existencia donde las heridas parecen cerradas, donde los fantasmas y sus infiernos simulan no existir a la vista de todos. Y en esa posibilidad, de cercanas utopías, el albor revela, con insolencia, que no tengo agua en las manos ni palabras en la mirada, solo silencio ante la agonía de un naufragio permanente».
Con prólogo de Efi Cubero. Dedicado a Gema, mi mujer. Por los naufragios compartidos.
El libro está dirigido a aquellos que han perdido toda esperanza de rehacer la vida, a los que no saben cómo recuperar la ilusión y hacer algo que merezca la pena. Por esto, se parte del desengaño, del más puro agnosticismo, para llegar a recuperar lo mejor de lo que se creía perdido. Según Juana Vázquez este libro es: de una humanidad fuera de toda duda, donde se libran todas las batallas contra el silencio de lo innombrable.
Según Efi Cubero, en la presentación de la obra en Badajoz, 10 de mayo de 2018: Nos hallamos ante un libro necesario, un libro importante, un meditado libro que no deja nada al azar. Yo diría que, para los que no nos conformamos con rutilantes bazares de baratijas varias o espejuelos cambiantes, nos hallamos ante un poemario imprescindible. De una gran calidad. De los que sin duda dejan huella. Dotado de una corriente filosófica, metafísica, más allá de la anécdota o de lo narrativo, pero muy pegado a lo real que deviene hacia una ética personal, a veces heterodoxa, como una declaración de principios que lleva implícita la desobediencia.
El libro tiene cuatro partes con unos títulos que describo:
-El primero, la levedad del barro, (connotación mesopotámica), subraya ese aceptar o mejor ese ser consciente de la fragilidad (barro) fuera del ámbito protector en el que se está. Reconocer ser “barro, la fragilidad” es importante para crecer. Por eso el primer capítulo, el yo lírico arranca con un “DE PIE en el umbral del misterio…” (pg. 21). Importante leer los poemas 26 y 32.
– El segundo capítulo titulado con un condicional Si el infierno soluciona la distancia, subraya esa lucha diaria en la que el ser humano entra, solo, enfrentándose con las circunstancias más adversas. Todos tenemos, necesariamente, que vivir el día a día con poco o con nada. El infierno se constata que no está fuera sino dentro de uno mismo. Es por tanto preciso hacer lo que el primer verso de este apartado dice, ESCRIBO sensaciones…ante lo inevitable. // Decir la verdad tiene su precio (leer página 35/ 40 /41).
– El tercer apartado, Movimiento de lo absurdo, nota ese viaje sin retorno que se inicia cuando se rompe con lo acostumbrado. Así, el yo literario preguntará COMO ENTEDER el movimiento de la derrota (leer página 54; primera estrofa de la página 57 y poema página 55 y 63.
– El último capítulo es el resumen de una toma de decisión, descubriendo la luz, Más allá de las tinieblas. Este apartado no es el final sino más bien la confirmación del viaje iniciado, el sentido de todo lo que se comienza a hacer después de las rupturas. De esta forma tiene sentido ese inicio de EXISTIR ante el misterio (pág. 67). Leer, especialmente, los poemas de las páginas 67, 70, 72, 76.
1
DUELE el parto de lo infinito
en este límite ingrávido
del alma.
La memoria juega a regresar a la nada.
El deseo retoma el color
en la piel de la vida.
Solo, en esta lucha. Solo
con el anhelo de alcanzar el silencio
de aquello que no se nombra.
Cómo parar esta inercia sin sentido.
2
BAJO AL ABISMO de lo frágil,
sin armadura,
donde la voz se amortigua
y el color desaparece.
En la superficie tenía lo esencial para existir
y me asfixiaba.
No hay nada, todo es
vacío.
La vida es un latido ante la miseria,
un punto cardinal donde el verso escapa
de la confusión
y rompe
la ceguera de la costumbre.
3
CUANDO EL DESTIERRO, el resentimiento, y la duda empujan al abismo y el sueño se oculta, con vergüenza, en los bolsillos, la fantasía escapa hacia los rincones del alma. Mientras, la calle fabrica rumbos a precio de saldo hasta ahuyentar las nubes del deseo.
4
VIVO en la certidumbre que encarna
la memoria del instante.
Los días ya no se asoman al borde del tedio
para beber
la hiel de los recuerdos.
El dolor no difumina la mañana.
Por qué dudar del perdón.
No hay vida sin dolor ni amargura sin sonrisa,
en este impulso que me empuja a seguir.
Hay tantas pérdidas, fracasos, errores
que una conquista me parece una falacia.
Por qué vacilar.
Más allá del aparente abandono,
en este domingo de resurrección,
busco un atajo, un lugar donde esconderme
para desbrozar utopías.
Por qué la clemencia.
La mañana me da una tregua, me entrego
a sus horas, dejo que pase este sentimiento
del vacío. Los espejos evitan la mirada.
El abrazo del ángel frena la búsqueda
de otro cielo.
Por qué dudar de la compasión.
ANTOLOGIAS
Y aparte de esto, y durante estos últimos años, vengo participando desde el año 2000 en el Vuelo de la Palabra del Ayuntamiento de Badajoz desde el año 2000 y en Antologías nacionales como la de Poetas en el foro Libertad 8 (2009), editado por Editorial Poesía eres tú, que recoge los poemas de cuarenta autores premiados durante cinco años por la crítica del foro mencionado. También, es muy querido el trabajo hecho en la antología coordinada por Javier Martín Pedrós de la Colección Poesía en la distancia, titulada Silencios encontrados (2010) o la editada por Kit-Book de Barcelona, Diez poemas, diez autores (2010) donde mi trabajo fue seleccionado, junto con otros nueve poetas en un concurso on-line, o el poema «Ebria de días» encargado por Antonio Salguero para su Itinerario Monumental de Mérida.
–El vuelo de la Palabra (Badajoz,Ayuntamiento, 2000)
–Otoño literario. “Otoño de sombra y sueño” (Badajoz, Homenaje a Robles Febré, 2006, pp. 37-49).
El espacio del verso (A Juan María Robles Febré)
Te has ido pero te quedas
en la verdad de la palabra
que resbala hecha rocío, brisa
calmando el dolor que nos embarga
huérfano el espacio del verso
a punto de nacer.
…
Vigilante madrugas estrellas
que bordan horizontes de mar
al filo de los besos.
Tu mano de lumbre
quemó torpes palabras
en el seno hondo del ser
despojando tu río de su orilla,
escapas así, con la muerte hacia la vida.
(Fragmento, pág. 38)
Respiro
RESPIRO las tardes de invierno
Sentado
Ante la misericordia de un poema
Que, sencillamente,
Me abraza.
(Fragmento, pág. 40)
–Rizomas(Mérida, Gallos Quiebran Albores, 2008, pp. 65-70)
Musa
Cómo olvidarte si eres fuego
y dejas la piel en los labios
de esta alcoba a punto de arder
y llena de silencios.
…
Apuntas la palabra
sobre el rostro del vacío
que gravita
en este cuerpo de raíces.
(Fragmento, pág. 67)
–Poetas en libertad 8 (Madrid, Poesía eres tú, 2009, pp. 88-90)
Hoy recuerdo a Baudelaire
A Gema en el día de San Valentín de 2008
A veces soy pájaro
en el monocorde sonido
del corazón que se alegra de verte
y en tu aoire planea
dejando atrás ese cielo de nubes
que potro dái me impidió
seguir el rumbo.
…
A veces soy la herida sana
de un profundo deshaliento
tanto es el amor que no hay culpa
capaz de cubrirme de pecado,
sólo
perdón
para olvidar la miseria del camino.
(Fragmento, pág. 88)
–Selección de poemas. 10 autores (Madrid, Kit-book, 2010, pp. 99-111)
Sumar memorias
No sabía que el aire le crece
en las manos, no sabía
que en los ángulos de su palabra
encerraba suspiros. No lo sabía.
Perdió la memoria del agua
. su paisaje nunca entendió
las lluvias de otoño.
…
(Fragmento, pág. 103)
–20 verdades fingidas (Badajoz, Vuelta de hoja, 2011, pp.93-98)
Transeúntes
…
Todo se volvió, feliz vacío
en esa danza, limpia, vertiginosa
de los cuerpos, pendientes
de la sombra.
…
(Fragmento pág. 98)
–Silencios encontrados(Málaga, Corona del sur, Col. Poesía en la distancia, 2011, pp. 71-75.)
Instantes
Compró la tarde
Y las prisas.
Quería descansar
en la corteza de sus brazos,
seguir la corriente de los labios
y grabar por los rincones
la magia
del deseo.
(pág. 73)
–Itinerario Monumental de Mérida (Edición de Antonio Salguero Carvajal. Mérida, Asamblea de Extremadura, 2012)
Ebria de días
Desciende entre ojos y prisas
hasta la Plaza, con el ritmo perezoso
del viento del sur. Arrastra voces,
lluvia mientras envuelve verbos
de amor en los que no hay cabida
para la ausencia.
Calle Santa Eulalia, llena de voces
que saltan por las esquinas
buscando la luz en el cansancio
de las tardes. Como un mar arrastra
naufragios, esta calle arrastra momentos,
horas llenas de vacío que enfrenta
el alma al impulso por vivir.
(pág. 21)
–Al final Poesía (Málaga, Corona del sur, Col. Poesía en la distancia, 2013)
Las nubes no son un buen lugar para vivir
Acudió al reclamo de la voz
y la puerta estaba rendida
a la derrota del silencio
y el silencio fue la huella.
Creyó tener la luz pero sólo
alcanzó la claridad artificial
que hace de los besos
un cruce de caminos.
…. (Fragmento, pág. 71)
–Como un río sonoro de manzanas. Antología del XX aniversario. Mérida, Gallos Quiebran Albores, 2013, pp. 113-118)
Los tres poemas que aparecen aquí son parte del trabajo que después sería la obra El nombre secreto del agua, publicada por Vitruvio tres años más tarde, 2016.
–En el vuelo de la memoria (Antología, 2018): https://faustinolobato.com/en-el-vuelo-de-la-memoria/
–Basta. Voces extremeñas contra la violencia de género (Antología, 2018): https://faustinolobato.com/basta-voces-extremenas-contra-la-violencia-de-genero/
LA SORPRESA DE LO HUMANO
(Badajoz, Fundación Caja de Badajoz, 2018)
Este poemario es un intento de subrayar aquello que más me llamó, y me llama, la atención en esta paternidad vivida como hombre maduro. Los versos de este libro explanan algunos gestos de mi hijo que me sorprendieron y provocaron admiración. No es solo la sorpresa de lo humano en él sino también la sorpresa de lo humano en mí.
Cada capítulo corresponde a un año, de los cuatro, de la vida de Rodrigo. En los versos aparece, entre otras cosas y de forma especial, mi preocupación por el tiempo. Sé que me iré en los mejores momentos de la vida de este niño. Cuando él sea mayor yo seré más mayor aún. Aunque esto no sea importante sí merece ser expresado para que cuando llegue el momento del hasta luego, el tránsito se acepte como algo normal y sea menos doloroso.
En este libro he incluido versos del poemario anterior Un concierto de sonidos diminutos. Esos versos aparecen en cursiva al final de algunos poemas (págs. 36, 38, 54, 58,60, 68, 72). En realidad, es un guiño al poemario de 2013 porque en el trabajo actual, La sorpresa de lo humano, trato –también- de lo cotidiano. Así, este poemario, continua aquello que en los versos finales de Un concierto de sonidos diminutos se expresa: “Tal vez habrá que esperar / uno, tres días, / a que el aire se vuelva sonido/ y no dañe el espíritu; / y el agua brote/de los labios de un libro.”
cada amanecer después de haber soñado con tus palabras.
Sí, me sorprende que no sorprenda a nadie
este concierto de sonidos diminutos
que me envuelve a diario;
la inutilidad de mis poemas
incapaces de expresar
la cobardía de mi verdad.
Sorprende
la búsqueda de no saber qué y disimularlo;
el tiempo, esa constante de momentos que pasan
y que quiero contener en el trazo de unos versos;
la paternidad que me hace crecer hacia dentro.
Sí, me sorprende y me halaga esta condición
de lo extraño;
esta gana de vivir en un continuo empezar
desde cero.
2
PRIMERO, el silencio, /esa nada que marca/ el ruido de los versos. Después, la palabra /inundando el cosmos de lo frágil /hasta sorprender / con un extraño ritual de paso. Y al final, el poema / invadiendo de formas invisibles / y emoción /el hastío de los días, / el punto cero, / en un continuo comenzar/ el puzle de la vida.
3
LO HUMANO, (p.47)
ese revés de mi ser animal con deseos,
el ímpetu del Paraíso perdido,
mi luchar a contracorriente,
la locura de hablar sin medida,
un descuido del gesto creador
al que llamo libertad,
la autonomía innominada,
mi cansancio de no saber soñar
y querer hacerlo,
la distancia inversa de lo infinito,
el renacer de las sombras.
Sí, lo humano
lo que tú y yo somos
cuando quebramos el tiempo
ante el espejo interior que nos habita;
cuando simplemente
nos miramos
y le miramos.
4
Ante esta mirada a lo fugaz, a lo pasajero… (p.92)
LOS VERSOS/ se transforman en voces que te nombran, /en el secreto diario / que nos desnuda, / como en aquel Jardín/ al que no he vuelto.
Los versos se convierten en la casa donde despertar, /en la mañana que rueda ante la lujuria de la luz / mezclada con la fiebre de los ruidos. / Son el azul de un silencio, / el anhelo/ que no deja en el olvido/ los abrazos y la risa, /el eco de lo eterno/ que nos envuelve/ hasta vencer la muerte.
Cuando se perdió la A
(Badajoz, Ayuntamiento, 2018)
Cuando recibí el encargo se me dijo que era porque tenía un niño de cuatro años. Y acepté porque consideré que era tan sencillo como esto, contar un cuento a un niño de segundo de infantil. Se trataba de hacer una historia que no estuviera muy lejos de la experiencia emocional de los niños de la edad de Rodrigo. Y pensé que por qué no trabajar un cuento tratando esta aventura de formar palabras. Era lo que lo que Rodrigo estaba viviendo. Y así me inventé una historia, antes de escribirla, contándosela a Rodrigo a la hora de dormir. Por tanto, este no es un cuento de despacho, de estos hay muchos, es un cuento con un soporte real, un contexto fácilmente reconocible. Trace una aventura buscando la A. Esta se desarrolla con obstáculos. Los obstáculos son cada uno de los retos que mi hijo y los niños de su edad tienen que asumir. Y junto a los obstáculos coloqué los valores que intentamos inculcar a esa edad, y siempre. Estos son, elementalmente personales y sociales: esforzarse, trabajar en equipo, ayudar a los demás, hacer bien las tareas, aprovechar lo que se tiene y no pedir más, dar las gracias.
Los personajes
En el cuento hay unos personajes protagonistas, Chulí -la tortuga- y Cindy- la mariposa azul-.Además de estos dos está Loloeolo-el viento, Estambra y Pistila -las flores-, los rayos solares, el cuervo. Los nombres los coloqué atendiendo a alguna característica de ellos, salvo el de la tortuga. Esta la recogí de un post en una red social donde un amigo había comentado que su tortuga había despertado del letargo hibernal. La llamaba Chulí. Hay que decir también que las tortugas eran un buen recurso en la literatura infantil, en los cuentos de todo el mundo. Me acordé de un cuento nigeriano donde una tortuga soñaba haciendo un mundo mejor. El nombre de la mariposa me vino acordándome de la mariposa del manzano la Cydia pomonella. Esta sería el nombre, Cindy.
La tortuga y la mariposa formarían un equipo. Se trataba de hacer trabajar a los personajes de forma cooperativa. Chulí y Cindy. Junto a los personajes principales tracé otros que aparecían en el momento, como el viento de marzo/ abril –Eolo. Le llamé Loloeolo. Las flores del manzano, que en una avanzada `primavera, habían comenzado a aparecer con sus estambres y pistilos exuberantes. Estos dieron el nombre a Estambra y Pistila. Uno de los personajes, el cuervo, es un guiño a las fábulas de Esopo de quien soy un admirador. ¿Y quién no?
La estructura
En el cuento hay tres espacios importantes que contextualizan el tema, que le dan soporte en diferentes secuencias:
-El jardín, donde está el manzano. Un recurso elemental de lo perfecto e idel desde los cuentos mesopotámicos.
– El camino, el tránsito, Este es más de un lugar es el espacio de los lugares. Es aquí donde se dan las pruebas, y se superan. El camino es el que los niñ@s hacen todos los días en casa, en la calle, en el colegio. Y en este hacer no dejan de tener pruebas:
El miedo. Este siempre se da antes de empezar una empresa; la duda ante las encrucijada y la consecuente certeza al encontrar el camino del medio-la virtud-después de aceptar la equivocación; dolor en forma de ansiedad a la hora de abandonar lo cómodo el “huerto de lechugas”; la soledad, ese tomar posiciones uno mismo de forma responsable a pesar de estar acompañado. La superación de pruebas va acompañada, en el cuento, de la adquisición de valores.
-El desierto. Lugar de encuentro. El espacio que marca el antes y el después. El punto de inflexión. No es extraño a nadie y menos a un niño el descubrimiento de las cosas en un sistema que les pide cosas, este puede ser tan arduo como entrar en un lugar complejo, como un desierto.
Las ilustraciones
El afán de Rodrigo por utilizar las pinturas de dedo, a veces güarrear y poner todo perdido, es interesante. Y aproveché ese brote artístico para crear con él texturas. De entrada consiguió hacer el manzano. Los otros personajes eran borrones infames. Y utilicé el sistema que emplea en el cole. Dibujar algo con lápiz y que él coloreara. Se trataba después de perfilar con un rotulador negro…y así se hizo. . En realidad a todas las manchas hubo que darle formas lógicas.
Un párrafo del cuento
Érase una vez un manzano donde vivían una tortuga y un gusano, bueno una oruga. Este árbol era la casa de esos animales, un refugio maravilloso en invierno…Un día, pasado el invierno, los rayos del sol empezaron a despertar las flores del manzano…
De pronto, una brisa, un pequeño viento, entró en escena…Chulí se ocultó en su casa-caparazón y Cindy se agarró al envés de una hoja del manzano…-¡Escuchad, dijo Loloeolo, vengo del país de los cuentos. Allí los niños se han puesto tristes porque ha desaparecido la letra A y no saben decir nada sin ella…
NOTAS PARA NO ESCONDER LA LUZ
(Valencia, Olé Libros, 2019)
El mismo autor declara en el prólogo que la luz está omnipresente en Notas para no esconder la luz, pero en realidad lo que está presente es «la consternación del poeta frente a los juegos contradictorios en que esta lo sume».
Exigente con la oscuridad, / elijo y una forma discreta de huir / ante la luz que, implacable, / refleja la verdad. // La luz rompe / la falacia de las prisas.
Antonio Salguero Carvajal ha comentado su impresión de lectura en
–Treciembre. Coro de voces (2021): https://faustinolobato.com/treciembre/
–Cabo de Gata. Espuma y verso (2021): https://faustinolobato.com/cabo-de-gata/
SIN RAZÓN PREVIA
(Lugar edición, Abismos del Suroeste Ediciones, 2021)
Es, según la editorial, «Un libro único, inclasificable, un ajuste de cuentas del escritor consigo mismo».
Fuego
Te vi pasar con la premura de una tormenta
que no admite pausas.
Hacía calor. La música amortiguaba los silencios.
Te vi pasar dejándome el regalo de tu sombra
y el perfume incierto de una mirada perdida
en la frontera de la calle.
¿Se quemaba la ilusión?
Te vi detrás del verso como un ángel guardián.
No había palabras.
Solo el tímido hueco del dolor.
Te vi pasar frente al espasmo absoluto de la noche
y dejé que arrojaras mis deseos en el infierno de siempre.
¿Se quemó la esperanza?
Qué decir si el destino marcó nuestro punto de llegada.
7+3, LA VIDA EN UN INSTANTE
(Lugar edición, Editorial, 2022)
Este libro, según el mismo poeta, es la plasmación de los diez días que pasó con su familia confinado por el covid, cuyos poemas recogen el miedo, la incertidumbre y la soledad del obligado aislamiento y lo transforman en versos terapéuticos. El sufrimiento cede ante la cura del amor, de la vida, en un instante.
[Instantes] Día cuatro
Cuatro días,
cuatro días manteniendo la fuerza
que cabe en un segundo,
y que parece un infinito.
Un segundo para mirar
y mantener el norte
y, con amor,
contemplar la vida en silencio.
EN EL ÁNGULO INCIERTO DEL ESPACIO
(Lugar edición, Editorial, 2022)
Según el autor, «Espacio y luz han estado en la intencionalidad de mi trabajo creativo desde hace años. En este poemario los espacios tienen una gran carga sensual, porque estos no son como los vemos, sino como los sentimos desde el sonido, el olor, los gestos o el silencio».
[En la huella del silencio]
31
Sin palabras, en el silencio grave de las formas
sin palabras. Sólo líneas curvas, construyendo
el lugar. Sin palabras, en un jardín de luces y sombras.
Espacios ocres y verdes, blancos y azules.
Sin palabras, ante el temblor del paisaje
rehago el silencio.
EN EL ALFABETO DEL TIEMPO
(Valencia, Olé Libros, 2022)
Según la editorial, este libro de poemas contiene un capítulo de vida convertida en literatura, donde nada queda al azar en este prontuario del desastre, de cuya entropía emerge la belleza.
Cuando
CUANDO pronuncio tu nombre
es el silencio quien responde.
Tu nombre resbala por las paredes,
atraviesa los rincones y vuelve
con la herida de no saber.
Cómo contar el tiempo,
descifrar las caricias
sorteando la luz del mediodía
en esta gramática de la ausencia.
Espero que ocupes tu lugar,
ahora, vacío.
DONDE EL ALMA IGNORA
(Valencia, Olé Libros, 2022)
Es un viaje por las emociones humanas, un recorrido desde el desgarro hasta la esperanza y no un recorrido lineal, sino el auténtico reflejo ante una situación sobrevenida, con subidas y bajadas, con giros y vacíos, un universo que Faustino Lobato pincela desde esa montaña rusa que es la psique (del prólogo de Luis Oroz).
[ÉXODO]
4
Cada vez más frágil
el espíritu
calla desiertos.
Esta fragilidad del campo de batalla,
lo que no acepto
y disuelve mi nombre,
la finitud que rompe su oleaje
en el ritmo de lo humano.
Cada vez más frágil
en esta espera sin compás
que desnuda mi alma.
Fragilidad de esta carne
que muda el canto
y moldea la frontera
de este cuerpo
hecho agua.
Cada vez más frágil,
sin palabras,
ante
el misterio
que me circunda
Faustino Lobato Delgado
Fotografía cabecera: Iglesia de Nuestra Señora de la Purificación, Almendralejo